NADA ESCONDIDO:
(Hebreos
4:12-16)
“Porque la
palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos;
y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y
discierne los pensamientos y las intenciones del corazón… Y no hay
cosa creada que no sea manifiesta en su presencia; antes bien todas las cosas
están desnudas y abiertas a los ojos de aquel a quien tenemos que dar cuenta… Por
tanto, teniendo un gran sumo sacerdote que traspasó los cielos, Jesús el Hijo
de Dios, retengamos nuestra profesión… Porque no tenemos un
sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que
fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado…
Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar
misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro”.
(Hebreos 4:12-16)
Pastor: Carlos Ramírez Jiménez:
Introducción:
En 2015, una
empresa de investigación afirmó que había 245’000,000 de cámaras de vigilancia
instaladas en el mundo, y que este número aumentaba 15% por año. Además
millones de personas captan imágenes con sus teléfonos celulares, desde fiestas
de cumpleaños hasta robos a bancos. Ya sea que celebremos tener más seguridad o
que censuramos la pérdida de privacidad, vivimos en una sociedad global con
cámaras por todas partes.
El libro de Hebreos, en el Nuevo
Testamento, señala que nuestra relación con Dios implica un mayor nivel de
exposición y responsabilidad que lo que podría captar cualquier cámara. Su Palabra,
como una espada
aguda y de dos filos, penetra hasta lo más profundo de
nuestro ser.
VV.11-14: Dos Grandes Provisiones Alientan a Los
Creyentes En Su Fe:
I. La Palabra De Dios, Que Revela Si Una Persona Está Viviendo Una Vida Plena o Espiritual: y
II. El Ministerio
De Cristo, Nuestro Gran Sumo Sacerdote, Quien Tiene Poder Para Hacernos
Gozar De La Inmediata Compañía De Dios:
I. La Palabra De Dios,
Que Revela Si
Una Persona Está Viviendo Una Vida Plena o Espiritual:
V.12: La Palabra de
Dios no es simplemente la colección de palabras suyas, un medio de comunicar
ideas; es viviente, cambia la vida y es dinámica al obrar en nosotros. Con la
agudeza del bisturí de un cirujano, revela lo que somos y lo que no somos.
Penetra
la médula de nuestra moral y vida espiritual. Discierne lo que está dentro de
nosotros, tanto lo bueno como lo malo. No solo debemos oír la Palabra sino que
también debemos permitir que moldee nuestra vida.
La Palabra[1] de Dios. Aquí
significa su Palabra
Inspirada, las Escrituras. Viva y eficaz**. Literalmente, viva y operativa. Tiene el
poder de alcanzar las partes más íntimas de la personalidad de uno y de juzgar
los más recónditos pensamientos, el alma y el espíritu. El significado es que la Palabra penetre hasta las
profundidades del alma y el espíritu, no entre ellos dos.
Representan
las facetas más recónditas de nuestra naturaleza inmaterial, así como las coyunturas y los tuétanos
representan el aspecto material. Tanto el alma como el espíritu pueden participar en lo que agrada o desagrada a Dios. (Para el significado de alma véase Marcos
12:30 y 1 Pedro 2:11; para el
significado de espíritu véase 1
Corintios 2:11 y 2 Corintios 7:1). Véase además la nota en 1 Tesalonicenses
5:23-24*.
NOTA: *1 Ts.5:23-24: una oración de dos versículos que cierra la sección
de instrucción y exhortación comenzando en 4:1.
Espíritu, alma y cuerpo no deben entenderse
como una definición de las partes de que se compone el hombre, sino como
representando al hombre entero. [Fuente: Biblia de Estudio RYRIE. Pág.
1689].
“Porque
la palabra de Dios es viva y eficaz**, y
más cortante que toda espada de dos filos; y penetra[2] hasta partir el alma[3] y el espíritu[4], las coyunturas y los tuétanos, y
discierne los pensamientos y las intenciones del corazón”. (Heb. 4:12)
Ayuda
Hermenéutica:
**energes = (ἐνεργής, G1756), lit: «en trabajo»
(comp. el vocablo castellano enérgico), denota activo, poderoso en acción (en =
en; ergon = trabajo;
en castellano, energía).
Se traduce «eficaz»
en 1 Cor.16:9 (rv y rvr), de la puerta abierta para el evangelio en Éfeso,
y hecha eficaz en los resultados de entrar por ella; y en Film.1:6, de la
comunión de la fe de Filemón «en el conocimiento de todo bien». En Heb.4:12
describe la Palabra
de Dios como «eficaz», esto es, llena de poder para conseguir
resultados. (VINE).
V.13: Nada puede ocultarse de Dios. El ve todo lo
que hacemos y tiene conocimiento de todo lo que pensamos. Aun cuando estemos pasando por alto su presencia,
Él está allí. Cuando procuramos ocultarnos de Dios, Él nos ve.
No
podemos tener secretos para Él. Es consolador saber que, aunque nos
conoce íntimamente, sigue amándonos.
NOTA: a quién tenemos que dar cuenta. Literalmente, a
quien es nuestra palabra. Es una especie de juego de palabras en el griego: si nuestras
vidas son conforme a la palabra de Dios (v.12), entonces nuestra
palabra (cuenta)
en el día del juicio será aceptable para Dios.
II. El Ministerio De Cristo, Nuestro Gran Sumo
Sacerdote, Quien Tiene Poder Para Hacernos Gozar De La Inmediata Compañía De Dios:
V.14: Cristo es
superior a los sacerdotes y su sacerdocio es superior al de los sacerdotes.
Para los judíos, el sumo sacerdote era la autoridad religiosa máxima en la tierra.
Solo él entraba en el Lugar Santísimo una vez al año para ofrecer
sacrificios por los pecados de toda la nación (Levítico 16).
Así
como el sumo sacerdote, Jesucristo es el mediador entre Dios y nosotros. Como representante del hombre,
intercede por nosotros ante Dios.
Como
representante de Dios, nos asegura el perdón de Dios. Jesucristo tiene mayor
autoridad que los sumos sacerdotes judíos porque Él es realmente Dios y hombre.
A
diferencia del sumo sacerdote que podía estar delante de Dios solo una vez al
año, Cristo siempre está a la diestra de Dios, intercediendo por nosotros. Él siempre está
dispuesto a escucharnos cuando oramos.
NOTA: V.14: Por
tanto—resumiendo
desde el 2:17. Un
Pontífice—Sumo Sacerdote, cuál es “el Hijo de Dios, más sublime que los
cielos” (7:26): arquetipo
y antitipo del sumo sacerdote legal. Penetró—“pasó a través
de los cielos”, es decir, por los cielos que están entre nosotros y
Dios, el cielo aéreo, y el de más allá que contiene los astros, el sol, la
luna, etc. Estos cielos eran el velo que atravesó nuestro Sumo
Sacerdote al penetrar el cielo de
los cielos, la presencia misma de Dios, así como el sumo sacerdote pasaba por el
velo al lugar santísimo.
Ni
Moisés, ni Josué, pudieron introducirnos en este reposo; pero Jesús, nuestro
Precursor, ya espiritualmente y luego en presencia misma, en cuerpo, alma y
espíritu, lleva a su pueblo al reposo celestial. Jesús—el antitipo de Josué (v. 8). Retengamos—lo opuesto de “escurramos”
(2:1), y de “recayeron” (6:6). Griego, “Echemos mano de nuestra profesión”, es decir,
de la fe y la esperanza, artículos de nuestra profesión.
V.15: Jesucristo es
como nosotros porque experimentó toda clase de tentaciones. Nos da
consuelo saber que Cristo fue tentado en todo, y puede compadecerse de
nosotros.
Nos
anima saber que fue tentado y no cayó en pecado. Él nos muestra
que no tenemos que pecar cuando nos enfrentamos a la tentación. Jesucristo es
el único ser humano que ha vivido sin cometer pecado.
NOTA: V.15: sino uno que
fue tentado en todo según nuestro semejanza, pero sin pecado. No es
que Cristo haya experimentado todas y cada una de las tentaciones que
experimenta un ser humano, sino más bien que ÉL fue tentado en todas la áreas en
que es tentado el hombre (los deseos de la carne, los deseos de los ojos y la
vanagloria de la vida, 1 Juan 2:16), y con particulares tentaciones
especialmente adecuadas para ÉL.
Estas
pruebas fueron posibles únicamente porque ÉL tomó sobre sí la semejanza de la carne de
pecado (Rom.8:3), porque si no se hubiese encarnado. Jesús no habría podido ser
tentado (compare Stg.1:13). Con todo, nuestro Señor fue distinto de todos los
demás hombres en que fue sin pecado i, es, no poseía una naturaleza pecaminosa como nosotros.
Puesto que ÉL
aguantó y pasó con éxito sus pruebas, puede ofrecernos ahora gracia y
misericordia para ayudarnos en tiempo de necesidad, porque sabe por qué cosas
estamos pasando.
V.16: La oración es la
forma en que nos acercamos a Dios "confiadamente". Algunos cristianos lo hacen
en forma sumisa con la cabeza inclinada, temerosos de pedirle a Dios que supla
sus necesidades. Otros lo hacen con ligereza, con poca reflexión:
v Acuda a Él con reverencia, porque Él es
su Rey;
v pero acuda también con confianza
absoluta porque
Él es su Amigo y Consejero.
NOTA: V.16: Lleguemos—acerquémonos. Confiadamente—con franqueza, libertad de habla (Ef.6:19).
Trono[5] de la gracia[6]—El trono de Dios nos ha
venido a ser trono de gracia por la mediación de nuestro Sumo
Sacerdote a la diestra de Dios (Ef.8:1; 12:2). Invocando la muerte meritoria de
Jesús, nuestro Sumo Sacerdote, siempre hallaremos a Dios sobre un trono de
gracia.
Contrástese la queja de
Job (Job 23:3-8) y de Eliú (Job 33:23-28). Alcanzar (recibir) misericordia[7]—“Compasión”, por su derivación (es decir, el fraternal sentir experimentado
en la participación del sufrimiento), corresponde con el carácter de
nuestro Sumo Sacerdote, “que
se compadece de nuestras flaquezas” (v. 15).
Hallar gracia—Corresponde a “trono de gracia”. La misericordia se refiere en especial a la
remisión y a la remoción del pecado; la gracia, a la salutífera impartición de
dones espirituales. Véase “Venid
a mí… y yo os daré descanso (descanso recibido al creer); llevad
mi yugo… hallaréis descanso (continuo reposo y paz hallados en la
diaria entrega al suave yugo de Cristo; lo
primero corresponde a “recibir misericordia”); esto último, a “hallar gracia”, (Mt.11:28-29).
Oportuno—antes que quedemos vencidos por la tentación; cuando más nos
haga falta, en tentaciones y persecuciones; tal cual convenga al tiempo, a las
personas, y a los designios (Salmo 104:27).
Gracia suficiente está
dispuesta para los creyentes para todas las exigencias; pero les es dada sólo
según la medida de la necesidad actual. Véase Rom.5:6: “a su tiempo”, “en
tiempo debido”. No, como explica Alford: “socorro a tiempo”, es decir para hoy, mientras nos esté aún ofrecido, “en tiempo aceptable”, 2 Cor.6:2. Socorro—véase el 2:19, “Puede socorrer a los son tentados”.
Concluyó:
Dado
que Jesús nuestro Salvador experimentó nuestras debilidades y tentaciones,
pero sin pecar, nosotros podemos acercarnos. No debemos temer porque, sin duda, hallaremos gracia
al acercarnos a él.
Ninguna Parte De Nuestra
Vida Está Escondida De La Gracia y
El Poder
De Dios.
___________
Nota y Bibliografía:
[1] G3056
λόγος = lógos: de G3004;
algo dicho (incluido
el pensamiento); por implicación tema (sujeto del discurso), también
razonamiento (facultad
mental) o motivo; por extensión cálculo; específicamente (con el
artículo en Juan) la Expresión Divina (i.e. Cristo):- noticia,
palabra, plática, pleito, predicar, pregunta, propuesta, razón, sentencia,
tratado, verbo, arreglar, asunto, cosa, cuenta, decir, derecho, dicho,
discurso, doctrina, evangelio, exhortar, fama, frase, hablar, hecho, mensaje.
(Strong).
[2] diikneomai =
(διικνέομαι,
G1338), ir a través, penetrar (dia = a través; ikneomai
= ir). Se utiliza del poder de la Palabra de Dios (Heb.4:12: «penetra»). En la lxx,
Ex.26:28. (VINE)
[3] G5590
ψυχή = psujé: de G5594;
aliento, i.e. (por implicación)
espíritu, abstractamente o concretamente (el principio sensitivo del animal
solo; así distinguido por un lado de G4151, que es el alma racional e inmortal;
y por el otro G2222, que es mera vitalidad, aun de las plantas:
estos términos de este mondo corresponden exactamente y respectivamente a los
hebreo H5315, H7307 y H2416):-
persona, ser, vida, muerte, alma, ánimo, corazón.
(Strong).
[4] G4151 πνεῦμα = pneúma: de G4154;
corriente de aire, i.e. respiración (soplo) o brisa; por analogía o
figurativamente un espíritu, i.e. (humano) el alma racional, (por implicación)
principio vital, mentalmente disposición, etc., o (sobrehumano) ángel, demonio,
o Dios (divino), espíritu de Cristo, el Espíritu Santo:- aliento,
espíritu, espiritual, viento. Compare G5590. (Strong).
[5] thronos =
(θρόνος,
G2362), trono, asiento de autoridad. Se emplea del trono:
(a) de Dios, Por ejem., Heb.4:16: «el trono de la
gracia», esto es, desde el que brota la gracia; Heb.8:1; 12:2;
Ap.1:4; 3:21 b; 4:2, dos veces; Ap.5:1. Es frecuente en Apocalipsis; en 20:12,
en los textos más comúnmente aceptados:
«del trono» (algunos tienen theos =
«Dios», rv, rvr, rvr77; vm sigue la lectura «delante del trono»);
comp. 21:3; Mateo 5:34; 23:22; Hech.7:49;
(b) de Cristo (por ejem.,
Heb.1:8; Ap.3:21a; 22:3); su asiento de autoridad en el milenio (Mateo 19:28
a);
(c) por metonimia, denotando
poderes angélicos (Col.1:16);
(d) de los apóstoles
en su autoridad milenial (Mateo 19:28 b; Lucas 22:30);
(e) de los ancianos
en la visión celestial (Ap.4:4 b: «tronos»: «sillas»); lo mismo en 11:16;
(f) de David (Lucas
1:32; Hech.2:30);
(g) de Satanás
(Ap.2:13: «trono»,
«silla»);
(h) de «la bestia»,
la última cabeza federal del Imperio Romano redivivo (Ap.13:2; 16:10). (VINE)
[6] G5485 χάρις = járis: de G5463; gracia
(como gratificante), de manera o acción (abstractamente o concretamente;
literalmente, figurativamente o espiritual; específicamente la influencia
divina sobre el corazón, y su reflejo en la vida; incluido gratitud):- merecer
aprobación, aprobar, congraciarte, donativo, favor, gozo, gracia, gratitud,
mérito. (Strong).
[7] misericordia.
El vocablo hebreo es hesed, usado cerca de 250 veces en el AT.
Significa amor
leal, firme o fiel y destaca la idea de una mutua pertenencia de
quienes están involucrados en una relación de amor. Aquí subraya el amor fiel
de Dios hacia su pueblo infiel. Véase también 4:1; 6:4, 6; 10:12; 12:6; Joel
2:13; Jonas 2:8; 4:2; Miq. 6:8; 7:18, 20; Zc.7:9. En el AT., la comunión, la
liberación, la capacitación, la iluminación, la dirección, el perdón, la
esperanza, la alabanza, y la preservación se basan en el hesed de Dios. (Fuente: Biblia
de Estudio RYRIE. Pág.867).
eleos = (ἔλεος, G1656), «es la
manifestación externa de la compasión; da por sentado la necesidad en aquel que
la recibe, y recursos adecuados para afrontar la necesidad de parte de aquel
que la exhibe. Se
usa:
(a) de Dios, que es
rico en misericordia (Ef.2:4), y que ha provisto salvación para todos los
hombres (Tito 3:5), para los judíos (Lc.1:72), y gentiles (Rom.15:9). Es
misericordioso para con aquellos que le temen (Lc.1:50), porque ellos están
rodeados de debilidades, y solo él puede socorrerlos. Por tanto, ellos deben
orar confiadamente en pos de misericordia (Heb.4:16) y, si para sí mismos, es
justo que también pidan misericordia unos para otros (Gal.6:16; 1 Tim.1:2).
Cuando Dios traiga su salvación a su manifestación en la venida de Cristo, su
pueblo obtendrá su misericordia (2 Tim.1:16; Jud.1:21);
(b) de hombres; por
cuanto Dios es misericordioso con ellos, él quiere que ellos muestren asimismo
misericordia unos a otros (Mt.9:13; 12:7; 23:23; Lucas 10:37; Stg.2:13). Etc…
(VINE).
- e-Sword-the. LEDD.
- Biblia de Estudio RYRIE.
- El Pan Diario. 2019.
- Pastor: Carlos Ramírez Jiménez. 13//01//2019.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario