Jesús
Advierte De Las Persecuciones Venideras:
(Mateo 10:16-42)
“He aquí, yo
os envío como a ovejas en medio de lobos; sed, pues, prudentes como serpientes,
y sencillos como palomas… Y guardaos de los
hombres, porque os entregarán a los concilios, y en sus sinagogas os azotarán;…
y aun ante gobernadores y reyes seréis llevados por
causa de mí, para testimonio a ellos y a los gentiles…”.
(Mateo 10:16-42)
Pastor: Carlos Ramírez Jiménez:
Nuestro Señor advierte a sus discípulos
que se preparen para la persecución. Ellos tenían que evitar todas las cosas
que den ventaja a sus enemigos, toda intromisión en los afanes políticos o
mundanos, toda apariencia de mal o egoísmo, y todas las medidas clandestinas.
Cristo predice dificultades no sólo para
que los trastornos no sean sorpresa sino para que ellos puedan confirmar su fe.
Les dice que deben sufrir y de quiénes. Así, Cristo nos ha
tratado fiel y equitativamente, diciéndonos lo peor que podemos hallar en su
servicio; y quiere que así nos tratemos a nosotros mismos, al sentarnos a
calcular el costo.
Los perseguidores
son peores que las bestias [la llamada santa
inquisición], porque hacen presa de los mismos de su especie. Los
lazos de amor y deber más sólidos a menudo se han roto por enemistad contra
Cristo. Los sufrimientos de parte de
amistades y parientes son muy dolorosos; nada hiere más. Simplemente
parece que todos los que quieren vivir piadosamente en Cristo Jesús padecerán
persecución; y debemos esperar que a través de muchas tribulaciones entremos en el reino
de Dios.
Muchos seudo pastores o líderes al ver
este panorama desistirán al llamado de la Gran Comisión, y aún pululan muchos
grupos que esto del sufrimiento no debe existir y mitigan otro
Evangelio del no sufrimiento y problemas, veamos entonces:
Usaremos
cuatro subdivisiones en la exposición del texto: fuentes
de la persecución, a quién temer, el costo del discipulado y el premio
compartido.
I. Fuentes De La
Persecución. Mateo 10:16–25.
Jesús no solo advierte a los discípulos
de una futura persecución, sino que mencionar tres fuentes:
Ø Del judaísmo oficial,
Ø Del gobierno romano, y
Ø De su propia familia, y
Ø Les aconseja qué hacer cuando viene la
persecución.
Otra vez Jesús emplea el verbo "envío"
(G649), del cual viene el término "apóstol".
La advertencia se presenta con la analogía
muy conocida de ovejas en medio de lobos (v. 16).
v La oveja es un animal sumamente dócil, débil y
sin defensas propias.
v El lobo, en cambio, es un animal feroz que no
perdona, sino que ataca, se prende a su víctima y no la suelta hasta matarla.
Por supuesto Jesús no habla literalmente
de animales, sino de personas que actúan en esa manera. "Lobos" representan a cualquiera persona o personas que
atacan sin piedad a los mensajeros del Rey con el fin de destruirlos. ¿Cuál debe ser
el espíritu y mentalidad del mensajero? Jesús
manda:
v Sed pues, astutos... y
v Sencillos... (v. 16).
No
deben ser serpientes, ni como serpientes en todo sentido, sólo en una
característica: la astucia. Deben llegar a
ser prudentes, cuidadosos, como el hombre que construye sobre la peña
(Mt. 7:24).
La
serpiente emplea gran cautela para evitar peligros. Por
otro lado, deben llegar a ser como palomas: sencillos,
puros, inocentes, no mezclados, sin engaño. Deben combinar
la prudencia con la sencillez
El mensajero debe estar atento para
discernir la intención de los hombres, no prejuzgando que todos sean malos.
Jesús está advirtiendo de una realidad perenne. Siempre ha habido y siempre
habrá algunos que, por distintos motivos, se oponen, o procuran hacer daño a
los mensajeros del reino:
1- La Primera Fuente De Persecución, y El Peligro Inmediato, Era
Del Judaísmo Oficial.
Los líderes judíos tenían la facultad,
otorgada por el gobierno romano, de juzgar y aplicar la sentencia a los
criminales y herejes, con algunas limitaciones.
Era un juicio más bien religioso, pues
los jueces eran judíos fieles a sus tradiciones y usaban la ley de Moisés como
la base para juzgar.
El término tribunales (v. 16), o sanedrines,
se refiere a grupos de hombres separados y ordenados para juzgar. Había tres
clases de tribunales:
· La clase menor, que operaba en villas de menos de 120 habitantes, consistía de 3 jueces.
· La clase intermedia, compuesta de 23 jueces, tenía más
autoridad y operaba en ciudades, y
· Pueblos de más de 120 habitantes.
Estos tribunales se reunían en las sinagogas, excepto en
Palestina. El Gran
Sanedrín, compuesto de 71 miembros, se reunía en el templo de Jerusalén (Edersheim). Esta persecución continuó,
de parte de los judíos, hasta la destrucción del templo en el año 70 d. de J.C.
2- La Segunda Fuente De Persecución Sería El Gobierno Romano:
Gobernadores y Reyes (v. 18).
El término gobernadores, o príncipes, se refiere a los
procónsules, como Sergio Paulo y Galio, y a los procuradores romanos, como
Pilato, Félix y Festo.
El título rey se refiere a la línea
herodiana —Antipas, Agripa I, Agripa II— y aun al mismo emperador (1 P. 2:13
ss.). Antes del año 70 d. de J.C., Jesús y varios de los apóstoles fueron
entregados por los judíos, por razones religiosas, a las autoridades romanas.
Pablo fue llevado a Roma para ser juzgado ante el César.
Después del año 70, los mismos romanos
perseguían a los mensajeros del Rey porque el cristianismo presentaba una
amenaza a la unidad del imperio. La persecución cesó solamente cuando
Constantino abrazó el cristianismo en el año 311 d. de J.C.
La persecución daría una oportunidad sin
igual de dar testimonio a ellos y a los gentiles (v. 18). Ellos se refiere a los tribunales judíos, y gentiles se
refiere a las autoridades romanas. Los apóstoles —Pedro y Juan, Esteban, y otros—
tuvieron oportunidad de predicar el evangelio al Sanedrín en momentos de
persecución, y el resultado fue positivo.
Su oración y preocupación en momentos de
persecución no era su propia libertad, sino el poder hablar con denuedo la
palabra de Dios (Hech. 4:31):
v Probablemente el testimonio de Esteban, en el momento de su martirio, tuvo
mucho que ver con la conversión de Saulo de Tarso (Hech. 7:58).
v Luego Pablo tuvo oportunidad de predicar ante los
reyes y el mismo emperador romano, lo cual hubiera sido imposible aparte de la
persecución.
Jesús promete que cuando sus apóstoles
sean llevados ante las autoridades por su testimonio cristiano, el Espíritu
Santo pondría en su boca las palabras para su defensa. No deben preocuparse de
antemano cómo o qué hablarían:
§ El caso de Juan y Pedro (Hech. 4), y
§ El de Esteban (Hech. 7) sirven de
ejemplo de cómo el Señor cumplió esta promesa,
§ Para no mencionar innumerables casos heroicos en la historia desde ese
entonces.
Es absurdo aplicar esta promesa a la
predicación normal en el púlpito, como algunos han hecho, para justificar el
descuido de una adecuada preparación.
El intento de justificar un ministerio sin preparación formal,
en base a esta promesa, es igualmente erróneo:
Ø La promesa no es para pastores perezosos en el púlpito,
Ø Sino para los presos en la cárcel por
causa de su fe.
3- La Tercera Fuente De Persecución Sería Sus Propios Familiares
(v. 21; comp. 24:9–13; Mr. 13:12, 13; Lc. 21:16–19).
El fanatismo religioso ha practicado
esta clase de persecución, especialmente cuando uno, por amor de Cristo, rompe
con las tradiciones religiosas de la familia. Tal ha sido la experiencia triste
de judíos convertidos a Cristo, donde el judaísmo predomina.
También se ha manifestado en países
católicos donde uno ha abrazado la fe evangélica. A veces los padres prefieren
ver a sus hijos muertos y no verlos abandonar la fe de la familia.
Por otro lado, en países totalitarios se ha
dado el caso de padres entregando a sus hijos a las autoridades, o viceversa,
cuando optan por una fe no aprobada por el gobierno.
Jesús Promete Que Será Salvo El Que Soporta La Persecución Hasta El
Fin (v. 22).
Esta
promesa tiene una doble aplicación. Es obvio:
§ En primer lugar, que el que
soporta las persecuciones hasta el fin de éstas será librado de tales males.
§ Por otro lado, significa
que el que soporta las persecuciones y otros males, por amor de Cristo, hasta
el fin de la vida, o sea, hasta el martirio, será salvo y librado en la vida
eterna (Ap. 2:10).
Cuando viene la persecución, Jesús
recomienda evitarla hasta donde sea posible, siendo astuto como la serpiente
(ver v. 16). Deben huir a las
ciudades que ofrecen refugio para evitar una confrontación y torturas
innecesarias. Jesús mismo practicó este criterio (Mt. 4:12; Lc. 4:29, 30). No hay mérito en buscar la persecución y el
martirio.
El
v. 23 Presenta Un Problema Sumamente Difícil De Resolver.
Jesús
comparte con sus discípulos una profecía: que antes que
ellos terminen de recorrer todas las ciudades de Israel, el Hijo del Hombre
vendría.
Hemos visto que la expresión Hijo del Hombre
se refiere a Jesús mismo.
El problema está en el significado de
antes que venga el Hijo del Hombre. ¿Cuándo y en qué manera vendrá? Se sugieren cinco posibles
soluciones:
1)
La reunión de Jesús con los discípulos al fin de ese
viaje,
2)
La aparición clara de Jesús como Mesías,
3)
La venida
en la persona del Espíritu Santo para consolarlos,
4)
La venida en la destrucción de Jerusalén, y
5)
La venida para el juicio final.
Otros mencionan la Transfiguración como una venida. "La
venida" de Dios, o de su Hijo, puede referirse a cualquiera crisis en que
el hombre está obligado a escoger su destino espiritual (Stagg). La mayoría de
los comentaristas optan por la cuarta solución, la cual nos parece más
aceptable.
Los discípulos serían tan semejantes a
su Maestro
que el trato que le darían a él, lo darían ellos también (vv. 24, 25). No debían sorprenderse por ser calumniados,
insultados, falsamente acusados, encarcelados, azotados y matados.
Jesús utilizó tres pares de correlativos que subrayan la relación
entre él y sus seguidores:
Ø Discípulo y maestro;
Ø Siervo y señor;
Ø Familia y padre.
Mateo introduce el término Beelzebul aquí sin
explicar el significado del nombre, pero luego lo define (comp. 12:24).
II. A Quién Temer En La
Persecución. Mateo 10:26–33:
Esta sección se dirige a los discípulos
que están contemplando una persecución inevitable por causa de su fe en Jesús.
Es natural que tal perspectiva infunda temor en sus corazones; pero, ¿temor a quién?
Jesús contesta este interrogante.
Deben
mantener un temor reverente ante Dios por cuatro razones:
v Porque todo será revelado;
v Porque los perseguidores sólo pueden
destruir el cuerpo físico;
v Porque el Padre Celestial cuidará de ellos;
v Porque Jesús los confesará en el
juicio final.
Puesto que el verbo "temer" se destaca en
esta sección, obsérvese las tres ocasiones donde se menciona y el énfasis de
cada una. No les
temáis[1]
(v. 26) es la traducción de un verbo
en griego del tiempo pretérito indefinido que prohíbe el comienzo de la acción.
Quiere decir: No
comencéis a temerles (comp. 5:17).
En cambio, No temáis (v. 28) es un verbo del tiempo presente en griego que prohíbe la
continuación de una acción ya comenzada.
Quiere
decir: No continuéis temiendo, indicando que los
discípulos ya estaban manifestando temor. Más bien, temed...
(v. 28b)[2] es también del tiempo
presente y manda la continuación de la acción.
Quiere
decir: Más bien, continuad temiendo. Esta
explicación aclara el énfasis de Jesús y da vigor al pasaje:
Ø La primera razón, para no temer a
los perseguidores es que todo el maltrato de parte de ellos vendrá a la luz, si
no en esta vida, por lo menos en el juicio final (v. 26).
Hitler trató de encubrir algunas de las
atrocidades cometidas contra la humanidad durante su régimen. Muchos creyentes
fieles fueron encarcelados, y otros muchos murieron por su fe. No lo sabemos
todo todavía, pero sí, una buena parte de las crueldades por parte de Hitler y
el testimonio heroico de parte de los creyentes han salido a la luz.
El mensaje que Jesús compartía con ellos
en privado y en los retiros en zonas aisladas, ellos deben publicarlo sin temor
ante las multitudes y en los lugares más destacados, aun desde las azoteas (v. 27).
Ø La segunda razón, para no
achicarse ante los perseguidores es que sus poderes maliciosos tienen su límite
(v. 28). El cuerpo físico es
temporal; el alma es eterna. Los perseguidores podrán hacer daño al cuerpo,
pero no pueden tocar el alma. En cambio, Dios tiene en sus manos el destino del
cuerpo y alma. Siendo así, es razonable que el hombre creyente obedezca a Dios
antes que a los hombres (Hech. 5:29).
Ø Otra razón, para no temer
ante los perseguidores es que ellos sólo procuran destruir, pero nuestro Padre
Celestial cuidará de los siervos suyos (vv.
29–31; comp. 6:26–34). Jesús emplea dos ilustraciones y dos silogismos para
subrayar el cuidado amoroso que Dios tiene de sus mensajeros fieles.
Dios cuida de cada uno de los pajaritos
de tan poco valor y tiene contados hasta los cabellos de nuestra cabeza.
El
silogismo sigue así:
(1) Dios cuida de los pajaritos;
(2) Los pajaritos tienen menos valor que los siervos de Dios;
(3) Sin duda Dios
cuidará de sus siervos.
El segundo
silogismo[3] sigue así:
(1) Dios sabe exactamente
cuántos cabellos tenemos;
(2) El cabello es de poco valor en comparación con la vida;
(3) Implícito, sin duda
Dios sabe de nuestras necesidades y cuidará de nosotros.
Ø La cuarta razón, por la cual los
discípulos no deben temer a los perseguidores es que si son fieles para
confesar a Jesús aquí, él los confesará en el juicio final (vv. 32, 33). En cambio, si por temor u otras consideraciones
niegan a Jesús en esta vida, él los negará, es decir, no los reconocerá como
suyos ante el Padre en el juicio final.
A través de la historia, comenzando en
el primer siglo, a menudo los seguidores de Cristo han sido obligados a optar
entre la cárcel, tortura, o muerte, si mantienen su fe en su Maestro.
Por otro lado, si niegan su fe en Cristo, se les
promete liberación. Esta
advertencia no se limita a momentos de persecución. Parece lógico que si el
riesgo de daño personal por confesar a Jesús es menor, como lo es en la mayoría
de las situaciones hoy en día, Jesús aplicaría las consecuencias de esta
advertencia aún más ahora.
III. El Costo De Ser
Mensajeros. Mateo 10:34–39:
Jesús inicia esta sección con una
expresión designada a sorprender a los oyentes y obtener su atención. Los
discípulos estaban acostumbrados a oír un énfasis pronunciado sobre la paz en las
enseñanzas de Jesús (comp. Mt. 5:9; 10:13; Mr. 9:50; etc.), además de las
profecías que hablaban de un reino de paz (Is. 9:6; Zc. 9:10, etc.) que el
Mesías establecería.
Pero el v. 34 dice en efecto, Ni comencéis a pensar que he venido para
traer paz a la tierra... (Comp. Mt. 5:17). Es la prohibición de comenzar una
acción. Luego repite el concepto con una afirmación negativa: No he venido para
traer paz... Era tan sorprendente que tuvo que repetirlo, a fin de
que los discípulos no pensasen que habían oído mal.
¡Qué sorpresa! ¡Qué contradicción a las enseñanzas
anteriores! Más
sorpresa todavía, cuando agrega que había venido para echar espada en la tierra:
v La espada es lo opuesto a la paz.
v Luego explica lo que quiso decir con
no traer paz, sino espada, a la tierra
(vv. 35, 36).
Hay una diferencia fundamental entre la
intención primaria de la misión de Jesús y el resultado práctico de la misma.
La intención primaria de Jesús fue y es la paz entre el hombre y Dios, y entre
hombre y hombre. Jehová es el Dios de paz (Rom. 15:33; 16:20). Él mandó a su Hijo
al mundo para traer paz (Lc. 2:14).
Jesús se conoce como el Príncipe de paz
(Is. 9:6); él anunció paz para los hombres; él es nuestra paz; él logró nuestra
paz con Dios en la cruz (2 Cor. 5:19). Sin embargo, el resultado práctico de su
venida al mundo, y de su venida al hogar, es a veces lo opuesto a su intención.
Jesús
sigue advirtiendo a sus discípulos del precio de ser sus discípulos. Cuando un
miembro de una familia decide seguir a Jesús, dándole lealtad absoluta como él
demanda, y si los demás miembros deciden no seguir a Jesús, o no seguirle en
ese nivel de consagración, inevitablemente se produce disensión. Unos procuran
seguir al Señor, y otros siguen a otros señores. Es como si una espada cayera sobre la
familia: produce división.
En la sección anterior, Jesús aconseja a
sus discípulos en cuanto a quién temer. Aquí aconseja a quien amar. Un costo
del discipulado es el amar supremamente a Jesús (v. 37). El discípulo tiene el deber de honrar y amar a todos los
semejantes, comenzando con los familiares (Ex. 20:12; Ef. 5:25 ss.). Pero el
honrar y amar a Dios en primer lugar es una demanda categórica.
El principio más profundo incorporado en
las enseñanzas y vida de Jesús se encuentra en los vv. 38 y 39 (Stagg). La
cruz es el símbolo de la muerte, el entregar la cosa más preciosa que tenemos
en este mundo: la vida. Esta es la última y más rigurosa demanda de Jesús para
sus seguidores.
La demanda es nada más que seguirlo,
como su nombre "seguidores" significa. El seguirlo a él
conduce por el camino que lleva a la cruz donde él entregó lo más precioso que
tenía en este mundo; su vida. Esto lo hizo a favor de nosotros. El que no está
dispuesto a ese nivel de amor y lealtad no es digno (v. 37) de él, es decir, no merece su gracia en la salvación, ni
emplear su nombre y llamarse "cristiano".
El v.
39 expresa lo mismo que el v. 38,
pero al revés. Anuncia la paradoja (una aparente contradicción) en el sentido de que
el que se dedica a preservar su vida (no siguiendo el camino de la cruz) termina perdiéndola, y viceversa. El que halla y el que pierde (v. 39) son participios del tiempo aoristo que enfatizan acción, o
decisión, definitiva y puntual.
Verdades
Prácticas:
En todos los órdenes, la recompensa o retribución ha sido
considerada como doctrina desde la antigüedad:
Ø Castigo para los malos,
Ø Recompensas para los buenos.
En
un principio este concepto no estaba muy espiritualizado. Se entendía que se
materializaba la recompensa por medio de la prosperidad económica:
§ Muchos hijos,
§ Salud física,
§ Prestigio personal, y
§ Amistad con Dios.
Los judíos más ortodoxos decían que Dios
confeccionaba una lista de acciones buenas y otra de malas. A fin de año Dios
hacía un análisis de estas listas y de acuerdo al resultado de este balance se
podría saber cómo sería su prosperidad al año entrante. Este balance
mercantilista perdió su sentido material y temporal cuando Jesucristo señaló
sin vaguedad que la recompensa está en la apropiación del reino de Dios.
Indudablemente,
la mejor recompensa de este siglo es poder ser aceptados por Dios como hijos
suyos sin mérito alguno, ser hermanos de Jesucristo y coherederos juntamente
con él de todas las cosas del Reino.
IV. El Premio Compartido.
Mateo 10:40–42:
Algunos opinan que el siervo del Señor no
debe pensar en recompensas, sino que debe servir por puro amor. Por supuesto el
motivo del servicio debe ser el amor al Señor, pero Jesús a menudo se refiere a
galardones. En
esta sección, Jesús dice dos cosas:
(1) Hay una relación íntima entre Jesús, sus seguidores y el
Padre; y
(2) Hay un resultado derivado de esa relación a favor de los
que colaboran con los siervos del Señor:
· El Padre envió a su Hijo al mundo para representarlo, y
· El Hijo envió
a sus discípulos
al mundo para representarlo a él.
Por lo tanto, el que recibe al siervo
que fue enviado por Cristo, en efecto recibe a Cristo y también al que envió a
Cristo, al Padre.
El que recibe al profeta, o sea, a
cualquier siervo enviado por Cristo, por el hecho de que sea enviado por él con
su mensaje, recibirá parte de la recompensa que corresponde a ese siervo, pues
está participando en su ministerio. "Recibir" en este contexto probablemente se
refiere a hospedaje, o sostén financiero.
El v.
42 no enseña que uno se salva por dar agua a un discípulo "pequeño".
Más bien, enseña que ese acto de proveer para un siervo del Señor es una
evidencia visible de una relación salvadora de antemano, pues indica simpatía y
acuerdo con el ministerio que lleva a cabo. Estos pequeñitos (v. 42) es una expresión que se refiere
a los creyentes discípulos y sencillos que no se destacan.
Concluyó:
En esta predicción de problemas, hay
consejos y consuelo para los momentos de prueba. Los discípulos de Cristo son
odiados y perseguidos como serpientes, y se procura su ruina, y necesitan la
sabiduría de la serpiente, pero la sencillez de las palomas. No sólo no dañen a
nadie sino que no le tengan mala voluntad a nadie.
Debe haber cuidado prudente, pero no
deben dejarse dominar por pensamientos de angustia y confusión; que esta
preocupación sea echada sobre Dios.
Los Siervos de Cristo deben pensar más en hacer el bien que en hablar bien. En el caso de
gran peligro, los varones de Cristo
pueden salirse del camino peligroso, aunque no deben salirse del camino del
deber. No se deben usar medios pecaminosos e ilícitos para escapar; porque
entonces, no es una puerta que Dios ha abierto.
El temor al hombre le pone una trampa, una trampa
de confusión que perturba nuestra paz; una trampa que enreda, por la cual somos
atraídos al pecado; y por tanto, se debe luchar y orar en su contra:
v La tribulación,
v La angustia, y
v La persecución,
v No pueden quitarles el amor de Dios por
ellos o el de ellos por Él.
Temed a Aquel Que Puede
Destruir Cuerpo y Alma En El Infierno:
___________
Nota y
Bibliografía:
[1] G5399
φοβέω = fobéo: de G5401;
atemorizar, i.e. (pasivamente) alarmarse; por analogía quedar asombrado de,
i.e. reverenciar:-
respetar, temblar, temer, temeroso, temor, espanto, miedo, amedrentar,
atemorizar. (Strong).
[2] fobeo
(φοβέω,
G5399), en griego antiguo, hacer huir (comp. fobos; véanse MIEDO). Se usa en
el NT siempre en la voz pasiva, con el significado o bien de: (a)
temer, estar atemorizado, su uso más frecuente, (por ejem., Hech.23:10, según
los mss. más aceptados); véase eulabaomai , en TENER TEMOR; o (b) mostrar
un temor reverente, véanse TEMOR = fobos (b); (1) hacia hombres (Marcos 6:20:
«temía»; Ef.5:33: «respete», rvr, frente a «reverencie» en la rv ); (2)
de Dios (por ejem., Hech.10:2; 10:22; 13:16; 13:26; Col.3:22; vha: «al Señor»;
1 P.2:17; Ap.14:7; 15:4; 19:5); (a) y (b) combinados en Lucas 12:4-5, donde
Cristo advierte a sus seguidores que no teman a los hombres, sino a Dios.
Véanse AMEDRENTAR, MIEDO, TENER MIEDO, RESPETAR, TEMER, TEMEROSO(SER), TEMOR,
TENER TEMOR. (VINE).
[3] silogismo. (Del lat. syllogĭsmus, y este del gr.
συλλογισμός). m. Fil. Argumento que consta de tres proposiciones, la última
de las cuales se deduce necesariamente de las otras dos. || ~ cornuto. m. Fil.
argumento cornuto. □ V. figura del ~. Microsoft® Encarta® 2009.
- e-Sword-the. LEDD.
- Biblia
dde Estudio RYRIE.
- Pastor:
Carlos Ramírez Jiménez. 01//02//2019.
- IGLESIA EVANGÉLICA BAUTISTA “EL SHADDAI”. Puyango-Ciudadela de Noé. Los Cardos Mz.E-Lt.18. III Etapa. Cel. 942-562691-Tumbes.
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