6
Pasos Que Salvarán Tu Matrimonio:
(1 Corintios 13:1-5)
La Preeminencia Del Amor:
“Si yo hablase lenguas humanas y angélicas,
y no tengo amor, vengo a ser como metal que resuena, o címbalo que retiñe… Y si tuviese profecía, y entendiese todos
los misterios y toda ciencia, y si tuviese toda la fe, de tal manera que
trasladase los montes, y no tengo amor, nada soy… Y si repartiese todos mis bienes para dar de comer a los pobres, y
si entregase mi cuerpo para ser quemado, y no tengo amor, de nada me sirve… El amor es sufrido, es benigno; el amor
no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece;… no hace nada indebido, no busca lo suyo,
no se irrita, no guarda rencor”.
(1 Corintios 13:1-5)
Pastor: Carlos Ramírez Jiménez:
Hemos escuchado
antes ese dicho de que las almas gemelas no nacen, sino que se crean a través
de los caminos de la vida. Como la mayoría de las parejas, mientras nos
acercamos al día de la boda, pensábamos que éramos almas gemelas y que
estábamos completamente preparados para el matrimonio.
Los matrimonios de nuestros padres
fueron modelos perfectos para nosotros y simplemente asumimos que tendríamos lo
mismo. Durante los primeros años del matrimonio comenzamos a entender que no
éramos almas gemelas y también temimos el haber cometido un grave error al
casarnos.
Mientras las discusiones se hicieron más
frecuentes y las palabras poco amables empezaron a cortar profundo, lentamente
comenzamos nuestro descenso al valle profundo de la desesperación. No nos dirigíamos
hacia allí a propósito, pero antes que nada estábamos enloqueciendo y no
pensamos que hubiera una salida. Tocamos el fondo de ese valle alrededor del
quinto año y entendimos que teníamos que comenzar a hacer cambios o íbamos a
tener un matrimonio miserable.
Para nosotros, una pequeña serie de pasos crearon la
chispa que necesitábamos para comenzar nuestro viaje fuera del valle. Los
siguientes 6 pasos no solo nos ayudaron a salir del valle, sino que también
ayudaron a encender nuestra relación.
1. Respondimos Una Pregunta Difícil:
¿Están dispuestos a hacer lo que sea necesario para tener
el matrimonio que siempre habían esperado y soñado? Esta fue la
fuerte pregunta que tuvimos que responder honestamente mientras nos encontramos
a nosotros mismos en este valle desesperante.
Así como el no prepararse apropiadamente
para un examen en la escuela, no nos habíamos preparado apropiadamente para lo
que tendríamos que hacer para tener un matrimonio exitoso, y esa falta de
preparación nos llevó al fracaso. Nos habíamos convertido en compañeros de
habitación que no gustaban de sí mismos, en vez de esposo y esposa que se
amaban.
Tuvimos que llegar a un estado de quebranto y
humildad antes de tener la voluntad de hacer lo que fuera necesario para salvar
nuestro matrimonio. Empezamos a leer libros sobre el matrimonio y a apoyarnos
en la ayuda de aquellos cuyos matrimonios eran sólidos.
No fue siempre fácil, pero siempre que
dejáramos nuestro orgullo atrás y a la vez hiciéramos lo que fuese necesario
para tener la alegría de vuelta en nuestra relación, comenzamos poco a poco a
ver cambios.
2. Tuvimos Que Hacer Una Elección.
Muchas
personas piensan que el amor es un
sentimiento. Hemos escuchado a parejas decir "Me
enamoré de él/ella". Pero el amor no
es un sentimiento, es una elección.
La biblia dice en 1 Corintios 13: “El amor[1] es paciente, es bondadoso; el amor no tiene envidia; el amor
no es jactancioso, no es arrogante; no se porta indecorosamente; no busca lo
suyo, no se irrita, no toma en cuenta el mal recibido; no se regocija de la
injusticia, sino que se alegra con la verdad”.
NOTA: 1 Corintios 13:1-13: Pablo explica la absoluta necesidad del amor (vv. 1-3); define la esencia del amor en 14 de sus características (vv. 4-7); y
compara las eternas perfecciones del amor con las imperfecciones temporales de los dones (vv.
8-13)
Este no era el tipo de amor que nos
mostrábamos el uno al otro los primeros cinco años de matrimonio. Las palabras
usad as en 1
Corintios 13 son palabras de acción, pero el amor que nos mostrábamos estaba
basado en cómo nos sentíamos hacia el otro.
Sin embargo, cuando comenzamos a poner 1
Corintios 13 en práctica comenzamos a escoger amarnos el uno al otro a pesar de
la forma en que nos sintiéramos.
A pesar de lo que ocurrió en el pasado, tienes una
opción. La opción es amar de la forma que la biblia lo define. Respondamos con
amor, actuemos con amor, y corrijamos con amor, de esta forma estaremos
siguiendo los pasos para fortalecer nuestro matrimonio de adentro hacia afuera.
3. Reconocimos Nuestras Necesidades Más
Grandes:
Tuvimos un momento de revelación en
nuestro matrimonio cuando leímos Efesios 5. La respuesta que necesitábamos
estaba justo ahí en blanco y negro. Dios comparte las necesidades más grandes
de un hombre y una mujer en el último verso de este capítulo.
En el verso 33 dice: "En todo caso, cada uno de vosotros
AME también a su mujer como a sí mismo, y que la
mujer RESPETE a su marido". La necesidad #1
de cada hombre es recibir el respeto y honor de su esposa. La necesidad #1 de
cada mujer es el amor y seguridad.
NOTA: V.33: Termina
esta porción reiterando el deber matrimonial entre los esposos con una recomendación
final a los dos en el v. 33: Por tanto se
refiere a lo dicho hasta aquí con respecto al amor de Cristo para la iglesia
como modelo del amor que cada esposo debe tener a su propia esposa y la
sumisión respetuosa de la esposa hacia su esposo.
Aunque el papel de cada
cónyuge es distinto, hay una igualdad de responsabilidad mutua y complementaria
para cada uno. De esta manera contribuyen a la armonía y unión familiar y
fortalecen la unidad de la iglesia. Más que todo, honran a Dios.
Este es el aire que le llena los
pulmones y le da vida. Había momentos en el matrimonio en los que no merecíamos
amor o respeto. Sin embargo, elegimos llenar esas necesidades el uno al otro
independientemente de si las merecíamos o no.
4. Aprendimos a Comunicarnos Efectivamente:
La definición de comunicación es impartir o
intercambiar información. En la superficie, una conversación con tu esposa
puede parecer tan simple como hablar y escuchar.
Sin embargo, si quieres tener una
comunicación efectiva en tu matrimonio hay mucho más en juego. El tono de tu voz dice mucho cuando estas conversando con
tu esposa sobre un tema.
De igual forma, el tiempo de la
conversación también tiene un rol importante. Hemos aprendido que nuestras
palabras, tono, tiempo y habilidades para escuchar son todas necesarias para
tener una comunicación efectiva.
Nuestro matrimonio ha sido salvado por
el trabajo diario en nuestras habilidades de la comunicación. Una forma de
hacer esto es tener una cita cada semana en la que podamos hablar de todo lo
que pasa en nuestras vidas. Hemos entendido lo invaluable que es compartir este
momento entre nosotros y nos ha ayudado a convertirnos en las almas gemelas que
siempre hemos anhelado ser.
5.
Elegimos Perdonar y Trabajar a
Través Del Conflicto:
Si has estado casado, has tenido algún tipo de
conflicto, pequeño o grande. Al no poderse evadir los conflictos en el
matrimonio, lo más importante es cómo responder.
Cuando teníamos conflictos en nuestro
matrimonio, nos tomaba días resolver el conflicto.
Ambos teníamos nuestras maneras y
ninguno de los dos quería ceder. Nuestra realización vino cuando entendimos que
estábamos en el mismo equipo y si podíamos dejar un poco atrás nuestro orgullo
podríamos comenzar a ir en la misma dirección.
Comenzamos a agraciarnos el uno al otro
y se hizo más rápido el perdonar. Fue un paso pequeño que sigue haciendo una
diferencia drástica en nuestras vidas el día de hoy.
6. Entendimos Que Jesús Tenía Que Ser El
Centro De Nuestro Matrimonio:
De vez en cuando nos preguntamos: "¿Cuál es el secreto
de un matrimonio exitoso?" El secreto es simple. Mantén a Jesús en
el centro de tu matrimonio y vida personal para tener un matrimonio exitoso.
Es
una elección que haces día a día al pasar tiempo con él. Te fomentamos a orar
y leer
[lo que conocemos hacer nuestro devocional] la
biblia para que él pueda seguir revelándose en ti a diario y enseñarte como ser
una buena esposa.
Finalmente:
Hagan
el esfuerzo de orar juntos cada día. No tiene que ser algo largo, pero si
consistente y dejar a Dios hacer el resto.
Si haces esto, Dios unirá sus corazones
junto al de él y permitirá que tú y tu esposa estén más juntos que nunca.
Se convertirán en las almas gemelas que
siempre han anhelado ser.
__________
Nota
y Bibliografía:
[1] G26 ἀγάπη = agápe: de G25; amor,
i.e. afecto o benevolencia; específicamente (plural) festín de amor:- ágape,
amado, amor. (Strong).
-Luz
Mundial Hoy. Thursday, February 15, 2018.
-Pastor:
Carlos Ramírez Jiménez. 03//08//2018.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario