LAS CARTAS
PASTORALES:
(Filipenses 2:19; Tito 1:4)
“Espero en el
Señor Jesús enviaros pronto a Timoteo, para que yo también esté de buen ánimo al saber de vuestro
estado”
(Filipenses 2:19)
“a Tito, verdadero
hijo en la común fe: Gracia, misericordia y paz, de Dios Padre y del Señor
Jesucristo nuestro Salvador”.
(Tito 1:4)
Pastor: Carlos Ramírez Jiménez:
Introducción;
Epístolas
pastorales.
Dentro del grupo de las epístolas
paulinas figuran tres cartas llamadas Pastorales:
·
Las dos
epístolas a Timoteo[1],
y
·
la dirigida a Tito[2].
Es un título que
solo parcialmente puede considerarse como una descripción acertada de su
contenido, porque no son estrictamente pastorales en el sentido de dar
instrucción sobre el cuidado de las almas:
Ø
Sus
destinatarios son las personas cuyo nombre llevan;
Ø
estas
cartas dan instrucciones con respecto a la organización y administración de las
iglesias;
Ø
indican también la manera
de resolver los problemas individuales de los miembros de la Iglesia.
1. DESTINATARIOS:
Aunque estas cartas son generalmente
conocidas como las epístolas pastorales, este nombre ha sido utilizado
solamente desde el siglo XVIII. La descripción es quizá una cuestión de
conveniencia más que de precisión, considerando que las cartas no son manuales
de cuidado pastoral.
Ambos, Timoteo y Tito, fueron asociados
cercanos de Pablo, y estas cartas dirigidas a ellos son las únicas de este tipo
incluidas en el Nuevo Testamento. No se sabe cuántas cartas semejantes a estas
escribió el Apóstol. La carta a Filemón, es de este tipo.
Timoteo es mencionado no sólo en Hechos.
Sino también en otras cartas de Pablo. Es probable que se haya convertido a la
fe cristiana durante el primer viaje misionero. Tuvo una participación muy
cercana con el Apóstol en su segundo y tercer viajes. En Filp. 2:19, 20 Pablo
habla cálidamente del cuidado e interés de Timoteo. Es admirable que hayan sido
preservadas las cartas personales dirigidas a un compañero tan querido.
Es extraño que Tito no es mencionado
para nada en Hech., aunque sí en Gál. 2:1, 3, de donde sabemos que era griego,
y en 2 Cor. 8:23 donde Pablo lo describe como su compañero y consiervo (ver
también 2 Cor. 12:18). De los dos compañeros de Pablo, Tito parece haber sido
el de personalidad más fuerte, porque en 1 y 2 Tim. hay varias alusiones a la timidez de
Timoteo.
2. PATERNIDAD LITERARIA:
Se dice que estas tres cartas fueron
escritas por el apóstol Pablo. No hay evidencia en la iglesia primitiva de lo contrario.
Pero desde principios del siglo XIX
muchos eruditos han disputado la autoría paulina tal como la tenemos ahora.
Hubo
dos tipos principales de teorías alternativas:
· una consideraba las cartas como
ficción, y
· la otra reconocía que había sido incluido
en ellas algo de material paulino genuino.
Ambas teorías consideran a las cartas
como seudónimas, es decir firmadas por el apóstol pero escritas por algún otro.
Generalmente se sostuvo por parte de aquellos que sostienen la no autoría
paulina que este procedimiento era muy aceptable en aquellos días y que no se
había incurrido en una falta moral, p ero
esto es discutible. ¿Cuáles son las
razones pues, que nos han conducido a las teorías de la no autenticidad?
1) Las Referencias Históricas En Las Cartas.
Estas
presuponen que Pablo había visitado recientemente Efeso y Creta. El problema
surge porque es difícil encuadrar estas alusiones en la historia que relata
Hechos. Algunos asumen que Pablo había sido liberado de la prisión mencionada
al final de Hech., y que los eventos referidos en las cartas pastorales
sucedieron después de esta liberación. Pablo debe haber sido encarcelado otra
vez a último momento y finalmente martirizado.
Muchos eruditos, sin embargo, rechazan
esta postura porque no hay evidencia para ella aparte de estas cartas. Se han
hecho intentos, sin embargo, para encuadrar las referencias históricas dentro
de la historia de Hechos, aunque esto no sea lo correcto.
Aquellos que no encuentran conveniente
ninguna de estas reconstrucciones simplemente tratan las referencias históricas
como ficticias y no hacen mucho esfuerzo para relacionarlas con la historia de
Hech.
2) La Mención De Los Oficiales De La Iglesia.
Se ha señalado que las referencias en
las cartas a los “sobreveedores” (algunos traducen “obispos”)
y “ancianos”
reflejan un período tardío de la era apostólica. Otra vez hay amplias
diferencias entre las teorías.
Es difícil estar seguro de qué cosas
significaban esos títulos en las diferentes etapas en la historia de la iglesia
primitiva, y las cartas pastorales no hacen una distinción real entre ellos. El
argumento por lo tanto es inconcluso.
Pero, ¿hubiera necesitado el verdadero
Pablo dar instrucciones a sus colaboradores sobre las cualidades requeridas de
los oficiales de la iglesia? Si consideramos las cartas como semipúblicas no es
difícil suponer lo que Pablo quiso enfatizar al escribir acerca de lo que ya
debía haber instruido a sus colaboradores.
3)
Las Referencias a Falsas Enseñanzas.
Algunos suponen que estas referencias
pertenecen al período de herejías desarrollado en el siglo II y no pueden por
lo tanto relacionarse con el tiempo de Pablo. Pero la evidencia no sostiene tal
teoría, porque no hay relación entre los mitos y genealogías referidas en las
cartas pastorales y en las herejías gnósticas tardías.
El principal interés era advertir a sus
colegas a que no perdieran el tiempo en estas falsas doctrinas. Si, como
suponen algunos eruditos, estas cartas fueron escritas para responder a las
herejías del siglo II, ¿por qué no hay referencias más directas al tipo de
error que prevalecía?
Una justa conclusión sería que las
falsas doctrinas no proporcionan una guía apropiada para fechar las cartas
pastorales.
4)
La Posición Doctrinal.
Se dice que la posición doctrinal
reflejada en estas cartas no está de acuerdo con la del apóstol
Pablo. Se llegó a esta conclusión al comparar la teología de las otras cartas
de Pablo con la teología de las pastorales.
Se sostenía que hay mucho que es
característico de otras cartas y que está ausente en las pastorales, aunque la
autoría de Pablo está fuera de discusión. Existe, sin embargo, una fundamental
debilidad en este argumento, ya que no considera la diferencia en las personas
a quienes está dirigida o el propósito de las otras cartas.
Pablo no esperaba escribir la suma total
de su teología en todas las cartas que escribió. No hay nada en las pastorales
que entre en conflicto con la posición teológica reflejada en las otras
cartas. La ausencia de temas tales como la justicia de Dios o la presencia del Espíritu
Santo debe ser considerada contra este trasfondo.
Lo que es menos fácil de explicar es la
repetición de lo que parecen ser declaraciones estereotipadas introducidas por
ex presiones tales como “fiel es esta palabra”, la cual no se repite en
ninguna de las cartas de Pablo. Pero, ¿elimina esto la autoría paulina? De ser
así se necesitará demostrar que Pablo no había usado tales declaraciones, y la
evidencia es simplemente insuficiente para probarlo.
5)
Lenguaje y Estilo.
Los argumentos basados en el lenguaje
son generalmente utilizados para señalar la no autenticidad de estas cartas. Sin
embargo, aun aquí hay diferentes maneras de pesar la evidencia. Es una cuestión
aceptada que muchas palabras nuevas que sí son utilizadas en estas cartas no
aparecen en ninguna parte de los escritos de Pablo, y hay muchas que no
aparecen en ningún lugar del NT.
La
cuestión importante es, sin embargo, si Pablo las había utilizado o no. Puesto que hay
ejemplos contemporáneos de uso de casi todas las palabras menos un puñado de
ellas, no hay razón por la cual Pablo no podría haberlas usado. Los argumentos
basados en la utilización de las palabras son insuficientes.
En cambio, se ha colocado más énfasis en
el estilo, y también se han utilizado varios métodos para determinarlo. Algunos
han apelado al uso o no de palabras tales como preposiciones, mientras que
otros han recurrido a la extensión de las frases o a la frecuencia de las
palabras.
En términos generales cualquier cálculo
estadístico de estilo es seria mente complicado a causa de la pequeñez de la
muestra disponible en las cartas pastorales. Algunos eruditos que en otros
terrenos favorecen a la autoría paulina se inclinan hacia alguna clase de “hipótesis del
secretario” para referirse al cambio del lenguaje.
Aun si estas líneas de evidencia son
consideradas suficientes como para asegurar un autor que no sea Pablo, subsiste
el problema respecto de lo que impulsó a alguien a escribir estas cartas en
nombre de Pablo y lo que lo llevó a elegir tres.
Al no haber una
salida satisfactoria, no parece irrazonable adherirse a la perspectiva
tradicional de que Pablo escribió estas cartas a sus consiervos con un propósito
histórico específico.
3. FECHA:
La cuestión de la fecha de estas cartas
está ligada íntimamente con la de su autor. Si Pablo no las escribió, entonces
es posible cualquier fecha entre el año 50 del siglo I y el principio del siglo
II.
Tal como hemos visto, algunos eruditos
entienden que estas cartas fueron escritas tan tarde que Pablo no podría ser el
autor. Desde su punto de vista la fecha de estas cartas resuelve la cuestión
del autor.
Pero si Pablo fue el autor, quizás usando un secretario, entonces la fecha más
probable para su composición es a mediados de la década de los 60 (los años
exactos son motivo de controversia), cuando Pablo estuvo prisionero en Roma.
Desde este punto de vista, es común
sostener que Pablo fue liberado de la prisión mencionada al final de Hechos,
pero fue arrestado por poco tiempo y finalmente martirizado, y que algunos de
los eventos referidos en las pastorales tuvieron lugar durante este breve
período de libertad.
Verdaderamente, 2 Timoteo suena como si hubiera sido
escrita por alguien que sabía que le quedaba poco tiempo de vida.
4. PROPÓSITO:
Es más fácil determinar el propósito de
2 Timoteo que de las otras dos cartas, porque ésta fue claramente escrita
mientras Pablo estaba esperando el resultado del juicio.
Es un urgente pedido a Timoteo para que
trate de ir a verle mientras aún hay tiempo.
Hay algunos pedidos personales en 2 Timoteo
4 en relación con una capa, algunos libros y pergaminos. La carta entera es un
aliento a Timoteo en el ejercicio de su ministerio.
En 1 Timoteo el propósito parece ser el
de d ar alguna guía
para la elección de los oficiales de la iglesia y para resistir a la falsa doctrina.
Pablo
declara su propósito en 1 Timoteo 3:14, 15. Claramente intentó equipar a
Timoteo con la instrucción necesaria esperando encontrarse con él pronto.
“Esto te
escribo, aunque tengo la esperanza de ir pronto a verte,… para que si tardo, sepas cómo debes conducirte en la casa
de Dios, que es la iglesia del Dios viviente, columna y baluarte de la verdad”.
(vv. 14-15).
En Tito hallamos una situación similar, así como
Timoteo había quedado con responsabilidades en Efeso, Tito tenía una tarea de
mayor responsabilidad en Creta. La carta, por lo tanto, habría ayudado a
fortalecer las manos de Tito ante las dificultades del ministerio.
5. CANONICIDAD:
Existe fuerte evidencia del uso de las
cartas pastorales en la iglesia primitiva. Los paralelos con los escritores
eclesiásticos no son meramente alusiones, sino que esto es igualmente cierto de
algunas otras cartas paulinas.
Existen algunos paralelos entre estas
cartas y 1 Clemente, lo cual sustentaría su uso antes del 95 Después de
Jesucristo, aunque algunos eruditos ponen en duda esta conclusión. Ciertamente,
Policarpo parece haber citado a dos de ellas y después de su tiempo hay una
fuerte evidencia no solamente de su uso sino de su autoridad.
Sin embargo, dos líneas de evidencia son
citadas a menudo para disputar la canonicidad temprana de estas cartas. Una es
el hecho de que Marción las excluyó de su canon (mediados del siglo II).
Ya que Tertuliano señala que Marción “las sacó” parece
razonable sostener que él sabía de ellas pero las desaprobaba. Es claro que el
canon de Marción fue altamente selectivo. La otra línea de evidencias cita el
hecho de que las cartas pastorales no aparecen en el Papiro Chester Beatty.
Sin embargo, la
evidencia para el uso y autoridad de estas cartas es muy fuerte; aquellas dudas
que se levantaron para esta clase de evidencia son insuficientes para superar
la opinión de que estas cartas fueron preservadas y atesoradas desde una fecha
temprana como cartas genuinas del apóstol Pablo.
Aunque algunos de los grandes temas
paulinos están ausentes en estas cartas, hay muchos pasajes doctrinales que
están totalmente en línea con la teología de Pablo.
Estos contienen una alta visión de Dios,
especialmente entendida en la notable doxología de 1 Timoteo 1:17:
· Su paternidad es
mencionada tanto como su función como Salvador (1 Tim. 4:10; Tito 1:3;
2:10, 13; 3:4), y
· como Juez Justo
(2 Tim. 4:8).
Las
referencias a Cristo están igualmente en
línea con la enseñanza usual de Pablo:
Ø su humanidad (1 Tim. 1:15),
Ø su paciencia (1 Tim. 1:16),
Ø su obra salvadora (2 Tim. 1:10; Tito 2:13; 3:6),
Ø su mediación (1 Tim. 2:5, 6), y
Ø su resurrección (2 Tim. 2:8).
Hay menos referencias al Espíritu Santo
que en la mayoría de las cartas de Pablo, aunque su obra no es pasada por alto.
El obrar predictivo del Espíritu es mencionado en 1 Tim. 4:1, y se le dice a Timoteo
que tenga atesorada la verdad que habita en él (2 Tim. 1:14). Él es el
responsable de la obra de regeneración y renovación (Tito 3:5).
Concluyó:
Las pastorales dejan en claro que la salvación
es el resultado de la misericordia divina por medio de nuestra fe (1 Tim.
1:16).
No hay nada en realidad en estas cartas
que contraríen la enseñanza de Pablo en ninguna parte.
___________
Notas y
Bibliografía:
[1] G5095
Τιμόθεος = Timódseos: de G5092
y G2316; amado de Dios; Timoteo, un cristiano:- Timoteo. (Strong).
[2] G5103
Τίτος = Títos: de origen latín pero
significa incierto.; Tito, un cristiano:- Tito. (Strong).
Τίω= tío. Véase G5099.
Τό = tó. Véase G3588.
- D.G.D.G. D.
Guthrie, B.D., M.Th., Ph.D., Subdirector del London Bible College, Londres,
Inglaterra.
- e-Sword-the.
LEDD.
- Pastor: Carlos
Ramírez Jiménez. 19//10//2017.
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