SÚPLICA INDIVIDUAL DE UN ANCIANO EN
PELIGRO:
(Salmo 71:1-24)
Oración De Un
Anciano:
“En ti, oh
Jehová, me he refugiado; No sea yo
avergonzado jamás… Socórreme y líbrame en tu
justicia; Inclina tu oído y sálvame… Sé para
mí una roca de refugio, adonde recurra yo continuamente…”.
(Salmo
71:1-24)
Pastor: Carlos Ramírez Jiménez:
Introducción:
No sabemos quién
escribió este Salmo ni cuándo, pero sabemos que era un anciano que había experimentado la comunión con Dios y su fidelidad
durante muchos años. Algunos piensan que el autor fue Jeremías, otros piensan
que fue alguien del tiempo posexílico.
Lo cierto es que el Salmo es relevante
en todas las épocas. El autor toma versículos y frases de otros salmos (22, 31, 35, 40) para expresar sus
propias emociones.
· El autor anónimo y anciano de este
Salmo clama pidiendo ayuda (vv.1-3),
· ora por su liberación porque tiene una
confianza basada en el cuidado que Dios ha tenido de él desde su juventud (vv.4-13), y
· determina seguir Alabando a Dios
(vv.14-24).
El
bondadoso cuidado de la Providencia divina en nuestro nacimiento e infancia
debiera comprometernos a una temprana piedad. El que fue nuestra ayuda desde
nuestro nacimiento debiera ser nuestra Esperanza desde nuestra juventud.
Que nadie espere bienestar o consuelo del mundo. Los que aman al
Señor, a menudo son odiados y perseguidos; los hombres se maravillan por sus
principios y conductas, pero el Señor ha sido la torre fuerte de ellos. Los siervos fieles
de Dios pueden tener la seguridad de que Él no los abandonará en la vejez ni
los dejará cuando les falte el vigor.
1. Confianza En Dios. Salmo 71:1-3:
V.1. Clamor Por Protección y Liberación. vv. 1-3:
Esta estrofa es casi igual al Salmo 31:1-3a (comp. Salmo 31); en el v. 3
hace algunos cambios, agrega continuamente, pues el Salmo destaca la fidelidad
de Dios a través de toda la vida del salmista.
Pero aun con este énfasis, el salmista,
en una crisis, quiere reconfirmar esta fidelidad de Dios. Quizá estaba tentado
a dudar, porque no sea yo avergonzado suena como el clamor de Jeremías
(Jeremías 15:18) cuando dudaba y pensaba que Dios le había fallado.
Roca fuerte (v. 3) es “roca de habitación” o “refugio[3]” en el heb. Las versiones
siguieron más la forma Deut.31:3. El salmista, por su larga experiencia con
Dios, desde su juventud, sabe que puede recurrir a Dios continuamente.
Al
clamar a Dios en oración, la fe del salmista va creciendo. Al principio del
v. 3 pide que Dios sea su fortaleza;
pero al pensar en lo que Dios ha hecho continuamente, sabe que ya es su
fortaleza y que ha mandado su liberación:
¿A quién ha mandado?
¿A los ángeles?
Sí, ciertamente manda a sus ángeles;
además, Dios tiene muchas maneras de liberar a sus hijos.
Juntos a mi padre de 87 años:
2. Dios Ha Sido Fiel, vv. 4-6:
La estrofa empieza con una petición; el
salmista está en crisis porque los enemigos le atacan. Pero lo demás de la
estrofa apela a la fidelidad de Dios que el salmista ha experimentado a lo
largo de su vida.
Tú…
eres mi esperanza, mi seguridad (v. 5). ¡Qué riqueza, la experiencia con Dios
durante muchos años! La respuesta del salmista es sencilla:
Ø Dios siempre ha sido fiel, entonces yo
siempre le alabaré. El v. 6 es semejante a
22:10.
Tú
eres mi roca y mi fortaleza (71:3)
3. Queja y Petición, vv. 7-13:
El salmista explica la oposición de los
enemigos; ellos se aprovechan de su vejez y su debilidad. Asombro (v. 7) puede tener sentido positivo, asombrados de los milagros que
Dios ha hecho para él.
O, más probable, puede ser negativo,
algo ominoso, señal del castigo de Dios. Están sorprendidos de cuánto ha
aguantado él. Aparentemente el salmista tenía una vida pública.
La fe del salmista es evidente; aun en
medio de su queja y petición, sólo hablar del asombro de los enemigos hace
volver su mente a lo que Dios ha hecho; entonces empieza a alabarle de nuevo (v. 8).
El v.
9 podría tomarse como falta de fe; pero, más bien es una nueva declaración
de fe y una nueva entrega al cuidado de Dios. A través de la vida, y también en
la vejez[1],
el que camina con Dios siempre tendrá nuevas experiencias que requieren nuevas
entregas, que dirigen a nuevos actos de confianza.
Los
vv. 10, 11 explican lo que sufre el salmista. Según Calvino lo que sucedió a
David es una experiencia común a los hijos de Dios; es decir, los malos, cuando
creen que es la voluntad de Dios que su pueblo esté expuesto a ellos para ser
víctimas de su rapiña, se dan a sí mismos licencia abierta para hacerles todo
tipo de daño.
Creen
que a los que Dios permite sufrir, los ha abandonado:
Ø Pero el salmista sabe que Dios no lo
abandona;
Ø siempre lo ha rescatado;
Ø está seguro de que lo hará ahora.
Por eso clama con confianza y pide que
Dios se encargue de juzgar a sus enemigos. El v. 12 usa palabras y frases de otros salmos (22:11, 19; 38:21, 22; 40:13).
4.
Confianza y Esperanza, vv. 14-16:
La confianza y la seguridad del salmista
van creciendo, y a la par aumenta su alabanza:
· De nuevo dice siempre (o
continuamente);
· el creyente crece en fe, también su
alabanza va creciendo.
V.14. Cuando nos enfrentamos al ocaso de la vida,
reconocemos que Dios ha sido una ayuda constante en el pasado:
Ø Cuando se debilitan nuestras capacidades
físicas, necesitamos aún más de Dios y nos damos cuenta de que sigue siendo
nuestra ayuda constante.
Ø Nunca debemos desesperarnos, sino
seguir esperando su ayuda sin importar cuán severas sean nuestras limitaciones.
Ø Depositar nuestra esperanza en Él nos ayuda a continuar, a seguir
sirviéndolo.
La palabra esperaré (v. 14) significa “esperar con expectación”. En el v. 15, proclamará (“contará”) y enumerarlas vienen de
la misma raíz.
Celebraré (v. 16) es “vendré” o “iré”. Puesto que está paralelo con haré memoria,
la idea debe ser: “vendré (a contar)”, por lo
tanto, celebraré. Contar los poderosos actos de Dios es glorificarle.
5. Experiencias De Victoria, vv. 17-19:
Junto a mi querida tía [Nicolasa], que partió al Señor después de 90 años.
En la oración, con la petición y la
reflexión, el salmista va recordando todo que Dios ha hecho en su vida. Pide
que todavía pueda contar todo esto a los jóvenes de la congregación y a sus
hijos. Los que han experimentado la liberación de Dios son responsables de
transmitir su testimonio a las próximas generaciones.
V.18.
Una persona nunca es demasiado anciana para servir a Dios, ni para orar. Aun cuando la
edad nos impida realizar ciertas actividades físicas, no necesita apagar
nuestro deseo de contar a otros (sobre todo a los niños) acerca de todo lo que
hemos visto que Dios ha hecho en los muchos años vividos.
Hasta lo sumo (v. 19) destaca “lo alto” de su justicia; nos hace recordar el Salmo
8:1: Has
puesto tu gloria sobre los cielos.
6. Esperanza y Alabanza, vv. 20-24:
El salmista ya está seguro de la victoria; por
anticipado alaba a Dios. En esta
alabanza usará:
Ø la lira,
Ø el arpa,
Ø sus labios,
Ø su alma, y
Ø su lengua.
Nótese: la semejanza
entre los vv. 13 y 24 que terminan las dos
partes principales del Salmo:
· En el v.
13 todavía el salmista está pidiendo el juicio
sobre los enemigos;
· en el v. 24 ya está viendo
su derrota.
Concluyó:
Los salmistas nunca dudan que Dios escucha
y responde; están seguros de la victoria de Dios que también es suya.
Recordar
las bendiciones de Dios a través de nuestra vida nos ayudará a ver la firmeza
de su gracia en todos esos años pasados,
confiar en El para el futuro y decirles a otros los beneficios de
seguir a Dios.
LA
VEJEZ:
Cuando la vejez
ingrata
Arranca nuestros
cabellos
O va colocando
en ellos
Débiles hilos de
plata;
Cuando la vista
perdida
Vaga en vano por
doquiera
Buscando la
primavera
Venturosa de la
vida;
Cuando el
hombre, en fin, su incierto
Rumbo sigue, y
triste ve
Que tiene bajo
su pie
Un hondo
sepulcro abierto
Hay un instante,
hija mía,
En que se pierde
la calma,
Y brota dentro
del alma
La negra
melancolía.
¿Has visto en la tarde hermosa,
cuando
el sol se va ocultando,
cómo
la sombra luchando
está
con la luz dudosa,
y al
moribundo destello
del
astro que desaparece,
el
mundo entero parece
más
bello, mucho más bello?
Pues así el
hombre distingue
Su sol, la luz,
su esperanza,
Entre una muerte
que avanza
Y una vida que
se extingue.
Si algún anciano
doliente
Cruza por tu
lado un día,
Y descubres,
hija mía,
Las arrugas de
su frente,
Nunca con frases
livianas
Muevas el labio
indiscreto,
Nunca faltes al
respeto
Que se merecen
sus canas
Crepúsculo de la
vida en la cándida niñez
Es la cándida
niñez;
Y puesta de sol,
la vejez
Que va a la
existencia unida.
Obediencia al
destino
Que en empujarle
se empeña,
Cada anciano nos
enseña
Nuestro inseguro
camino.
Camino que sólo Dios
Nos traza, pues
ignoramos
Si de esos
viejos marchamos
Al par, delante
o en pos.
La mundanal
arrogancia
Fácilmente se
derrumba,
Y de la cuna a
la tumba
Es muy breve la
distancia.
El viejo tiene
su pie
Junto a esta
tumba sombría:
Préstale
amparo, hija mía,
Mira
cuán débil se ve.
Si
hoy con intento siniestro
Apoyo
al viejo negamos,
Cuando
en su edad nos veamos,
¿Quién será báculo nuestro?
___________
Notas Y Bibliografía:
[1] H2209 זִקְנָה = zicná: femenino de H2205; edad
vieja:- viejo.
(Strong).
[2] H4583
מָעוֹן = maón: o מָעִין = maín (1 Cron.4:41); de lo mismo que H5772;
morada, de Dios (el tabernáculo o el templo), hombres (su casa) o animales (su
guarida); de aquí, retiro (asilo):- cabaña, guarida, habitación, morada, refugio.
(Strong).
- e-Sword-the. LEDD.
- Biblia de Estudio RYRIE.
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