Parte III LOS DISTINTIVOS BÍBLICOS DE LOS BAUTISTAS:

Parte III

LOS DISTINTIVOS BÍBLICOS

DE LOS BAUTISTAS:

 

Pastor: Carlos Ramírez Jiménez:

Otras iglesias, practican el lavamiento de pies como otra ordenanza, o alguna otra buena práctica como esa. El lavamiento de pies, en la humilde opinión del que esto escribe, es, más que una ordenanza, una buena práctica de higiene que seguramente es agradecida por aquéllos que tienen que convivir todos los días con los que lo practican; pero en cuanto a lo espiritual se refiere, no tiene ningún valor. Una vez más, la práctica de estas dos ordenanzas, al igual que los otros distintivos, ha sido características de los creyentes del Nuevo Testamento a través de los siglos.

A.                   CREEMOS QUE EL ÚNICO MÉTODO DE BAUTISMO EN EL NUEVO TESTAMENTO ES POR INMERSIÓN:

¿Administración De Las Ordenanzas?

¿Qué Es Una  Ordenanzas?

Una ordenanza es una ceremonia instituida por Cristo que representa una verdad espiritual. Es algo que podemos ver y sentir y que simboliza una verdad espiritual.

1.  Las ordenanzas no son sacramentos (del latín ordo, una orden).

a. No confieren gracia, no son canales para conducir algo.          

b. La idea de sagrado es del latín sacramentum para musterion (Ef. 5:32; 1 Tim. 3:16; Ap. 1:20).

c. No son un medio de gracia o un sello de gracia.

d. Los conceptos sacramentales básicamente proponen que los humanos puedan controlar o dispensar la deidad.

e. El católico Romano propone siete sacramentos: bautismo, misa (eucaristía), confirmación, penitencia, extremaunción, ordenación y matrimonio.

f. El AT., no provee ningún sustento para las ideas sacramentales.

g. Tres pruebas muestran que las ordenanzas fueron entendidas como órdenes:

1)    La observancia fue ordenada por Cristo.

2)    La observancia fue practicada por la iglesia primitiva.

3)    La observancia fue explicada en las Epístolas demostrando que su enseñanza es importante y que deben ser observadas universalmente y similarmente.

2.   Bautismo.

Notemos: la comparación de la foto de lo que Cristo hizo y cómo nosotros debemos andar  en una nueva vida porque hemos sido resucitados con Cristo. 

EL  BAUTISMO APUNTA EN TRES DIRECCIONES:
PASADO	PRESENTE	FUTURO
Nos hace recordar que Cristo murió, fue sepultado y resucitó	Muestra que quieres servir al Señor.  Te identificas con Él y con los hijos de Dios.	Apunta al momento cuando  “andarás en nueva vida”.  Vivirás diferente de cómo  lo hacías antes de  convertirte.

     Es una identificación.  Gálatas 3:27.  En este versículo Dios nos enseña que hemos sido bautizados en Cristo y que estamos revestidos de Cristo. El bautismo se compara con la acción de vestirse de nuevo. En Romanos 6 se presenta de nuevo la idea de identificación. Cuando nos bautizamos por agua estamos dando testimonio frente a todos los que nos ven de que estamos en Cristo Jesús. Es izar la bandera y declarar que pertenezco a Cristo.  La figura en Gálatas 3:27 es la de vestirse. 

Es como un jugador que se pone la camiseta (revestirse) cuando va a jugar un partido. 

Se pone el uniforme de su equipo para identificarse con él.  Lo mismo sucede cuando el nuevo creyente se bautiza porque su bautismo es su camiseta.

Desde ese día todos saben que esa persona se identifica con:

·      El Señor Jesús.

·      La iglesia de Jesús y específicamente con los de Jesús en esta iglesia.

Así que bautizarse es tomar la decisión de declarar abiertamente a todo el mundo que ahora pertenezco a Cristo y que voy a servirle junto con los suyos en esta iglesia.  Es el anuncio público con trompeta que soy soldado y estoy en las filas de Cristo Jesús. 

En resumen: Dios ha establecido cómo debe ser el bautismo.  Debe ser hecho conforme a Su Palabra, de lo contrario Él no lo aceptará.  Los cuatro requisitos para un bautismo bíblico que Dios acepta son:

1.  ¿Quiénes? El candidato – Creyente en el Señor Jesús antes del bautismo.  El orden no es bautizarse primero y luego creer.

2.  ¿Cómo?  El modo – Inmersión de todo el cuerpo.  No es por aspersión o efusión.

3.  ¿Por qué? El motivo – Obediencia e identificación con Cristo en su muerte, sepultura y resurrección. No es para lavar mis pecados o para obtener la salvación.

4.  ¿Por quién es? El administrador – Una persona autorizada  por la Iglesia de Cristo (de una iglesia local). No es administrado por cualquier persona que actúa por su propia cuenta:

a.  Definición: El bautismo cristiano es la inmersión de un creyente en el agua en señal de su previa unión en la muerte y resurrección de Cristo.

 1)   El bautismo es una inmersión en el agua por un inmerso.

 2)   La inmersión en el agua es bautismo sólo cuando esta inmersión es de un  creyente; creemos en un bautismo al creyente.

 3) El bautismo es una enseñanza simbólica retratando un hecho histórico del 30 D.C.

 4) El bautismo es un testimonio  público de previa conversión personal, que ha pasado de la muerte a la vida.

b.  El bautismo tiene las cualidades de una ordenanza instituida por Cristo.

1) Él ordenó el bautismo en la Gran Comisión (Mt. 28:19, un nombre; Jn. 4:1-12).

2) Los apóstoles ordenaron a los creyentes para ser bautizados (Hch. 2:38; 10:47-48).

3)  El Bautismo fue practicado en todas las iglesias (1 Cor. 1:14-17; Rom. 6:3-4; Col. 2:12; Hch. 2:38, 41; 8:12, 36-38; 10:47; 16:14-15, 33; 18:8; 19:5).

c.  El mandato de Cristo es universal y perpetuo a través de toda la edad de la iglesia.

1)  La ordenanza fue primero presentada por Dios a Jn. el Bautista, el que sumergía, el que remojaba (Jn. 1:33).

2)  La sumisión de Jesús (Mt. 3:15) muestra que esa inmersión no es opcional.

3)  Jesús ordenó la observancia en el fin de la edad (Mt. 28:20).

d.  La inmersión de Juan fue distinta y diferente de las inmersiones Judías.

1) Igualmente practicada por los judíos de los periodos del AT., y del NT.,  y por la comunidad del Mar Muerto.

2) Los Judíos reconocieron que fue un nuevo procedimiento de Jn. con un nuevo significado. (Jn. 1:25).

e.  Jesús no presentó una inmersión diferente.

1)  Fue claramente una continuación, pues Jesús no hizo ninguna inmersión (Jn. 4:1-2).

2) Su mandato a los discípulos para la inmersión fue con autoridad de la Trinidad (nombre, Mt. 28:19).

3)  La única diferencia fue la fe en la venida del Cordero y luego fe en la resurrección del Cordero.

4) Un significado adicional empezó en el Pentecostés: identificación, colocación (Hch. 1:5).

5) La unión en Cristo es evidente en una nueva vida (Rom. 6:3-4; Col. 2:12)

            f. Simbolismo del Bautismo.

1)   La inmersión es un memorial para retratar el pasado (Cristo), 30 D.C.

      (Conmemorativa).

2) La inmersión simboliza un evento reciente, la unión del creyente con Cristo (Emblemática).

3)   La Inmersión es una predicación profética proclamando el futuro.

              (Predictiva):

a) Ilustra la futura resurrección del cuerpo físico del creyente (Rom. 6:5).

b) Proclama la reunión futura del nuevo cuerpo, la expectante iglesia en la asamblea celestial.

4) Inferencias que necesitan ser reconocidas:

a) El Bautismo principalmente ilustra la muerte y resurrección de Cristo.

b) Declara la unión del creyente con Él en Su muerte y resurrección.

c)  Proclama la base para el cambio del creyente, el derramamiento de la sangre en la muerte.

d) Solamente la inmersión ilustra estas verdades de la muerte y resurrección.

e) Ninguna otra forma puede calificarse como el bautismo Cristiano.

f)  El Bautismo ilustra el origen de la unión y vida; la cena del Señor retrata continuación y crecimiento.

g) El Bautismo, puesto que ilustra el nacimiento, no necesita ser repetido.

g.  ¿Qué acerca de la aspersión de infantes? La aspersión de infantes es ahora practicada por la mayoría del cristianismo.

1)    La práctica está enteramente sin la garantía de las Escrituras:

a)  No hay un mandato para hacer eso (Mt. 19:13-14; Mr. 10:13-14; en Lc. 18:15-16, los discípulos lo impidieron, no había sucedido).

b) No hay ejemplo de las Escrituras de tal acción (todos en la familia creyeron; Hch. 10:24, 44-48; 11:14-17; 16:31-34; 18:8; 1 Cor. 1:14-16, vea 16:15; no de Lidia, 16:14-15).

c)    No hay pasajes en los cuales está implicada.

2)    La práctica está expresamente contradicha por la enseñanza de la Escritura.

a)  El Bautismo sigue a la evidencia de arrepentimiento y fe del candidato (no de un padrino).

b) El Bautismo expresa consciente unión voluntaria con Cristo. (Rom. 6:11).

c)  Por paralelo a la  observancia de la comunión, un candidato debe poder discernir la importancia del símbolo (1 Cor. 11:29).

3)  La práctica estableció el error como si fuera cumplimiento de algún beneficio sacramental (regeneración bautismal).

4)  Los argumentos para sostener la práctica descansan en un peligroso apoyo:

a)    Que la iglesia puede cambiar un mandato de Cristo (no una iglesia o varias).

b)    Que el bautizo reemplaza a la circuncisión (no lo hace).

c)    Que está basado en un pacto o conexión orgánica a padres creyentes o supuestos padrinos o a la iglesia (en vez de la fe personal).

5)  Es un argumento válido contra tal práctica, el que no hay acuerdo entre los paidobautistas en cuanto a una razón para hacerlo.

6)  Los malos efectos de la práctica pueden ser eternamente peligrosos:

a)  Porque algunos piensan que ya son regenerados, y por lo tanto, no buscan el arrepentimiento.

b)   Por oscurecer la distinción entre salvado y no-salvado.

c)    Por combinar la iglesia y el mundo, incluyendo a no salvados como miembros de las iglesias.

d)  Por adoptar los mandatos de los hombres, estos están inclinados al camino de Roma.

        3.         La Cena del Señor.

a.    Definición: El rito en el que los miembros de una iglesia reunida participa del pan y la copa en señal de continua limpieza por, y en dependencia, del derramamiento de la sangre de Cristo:

1)   Es un memorial, una remembranza (Lc. 22:19; 1 Cor. 11:24-25), un testimonio (1 Cor. 11:26), una expresión de comunión y acción de gracias (1 Cor. 11:24; Mt. 26:27).

2)   Hay participación individual de elementos distribuidos, pan y copa; en la mesa (1 Cor. 10:21) para la cena (11:20).

3)   El pan es simbolismo del cuerpo quebrantado de Cristo, la copa de Su sangre derramada.

4)   Es solamente simbólico, no conduce gracia, la bendición está en la obediencia no en los elementos.

5)  La observancia es un testimonio público que el creyente está espiritualmente alimentándose en Cristo (Jn. 6:53), confesándose y siendo limpiado (1 Jn. 1:9).

6)   El participante está retratando principalmente la muerte y resurrección de Jesús (1 Cor. 11:24-26).

7)  Cada observancia también proclama el regreso anticipado de Jesús (1 Cor. 11:26).

b.    Indicaciones que la observancia perpetúa fue instituida por Cristo:

1)  Fue demostrado y ordenado personalmente (Mt. 26:26-29; Mr. 14:22-25; Lc. 22:17-20; 1 Cor. 11:23-26).

2)   Los apóstoles mandaron la observancia (1 Cor. 10:21; 11:23; hasta que Él venga, 26).

3)  Las iglesias primitivas practicaron la comunión como congregaciones. (Hch. 2:42; 20:7).

                   c.  El Simbolismo de la Cena del Señor:

1)  La comunión es un memorial para retratar el pasado (Cristo), 30 D.C. (conmemorativa).

a)   Declaramos que Su cuerpo fue quebrantado por nosotros (1 Cor. 11:26).

b)   Proclamamos que Su sangre fue derramada por nosotros (Mr. 10:45; 12:24).

c)   Proclamamos que el propósito de Su muerte fue pagar la culpa de nuestros pecados (1 Cor. 11:24; 5:7).

2) La comunión es el símbolo de un proceso presente en la santificación (emblemática):

a)   Muestra apropiación personal de los beneficios de la muerte de Cristo (Jn. 6:53,63; 1 Cor. 10:16).

b)   Ilustra la unidad de un cuerpo local de creyentes. (1 Cor. 10:16-17).

3)    La repetida observancia testifica del rapto futuro y el cielo (predictiva):     

a)  La observancia es “hasta que Él venga” (1 Cor. 11:26), hasta que Cristo regrese para el rapto de la iglesia.

b)  Allí será la remembranza milenial con los discípulos (Lc. 22:16,18; Mr. 14:25; Mt. 26:29).

4)      Inferencias que deben ser reconocidas:

a)   El Bautismo retrata el principio espiritual: comunión, crecimiento espiritual.

b) La observancia de la comunión es con frecuencia repetida, pero sólo siguiendo a la inmersión del agua para testimonio de la verdad.

c)    La observancia es sólo un símbolo de una previa verdad espiritual, no una comunicación de gracia.

d)   La bendición está en conexión con la obediencia (una manifestación de la fe; activa respuesta a la Palabra), como otros aspectos de santificación.

e)  El compañerismo con Cristo está siendo principalmente retratado; el compañerismo con otros es sólo cuando otros están en Él.

3.4. Todo Creyente Es Un Sacerdote:

En ninguna parte del Nuevo Testamento, documento oficial para la Iglesia que instituyó el Señor Jesucristo, se encuentra que ésta haya sido organizada con sacerdotes, sino con pastores, presbíteros, obispos o ancianos. Todos estos términos se usan hasta cierto punto indistintamente para referirse a los ministros encargados de la predicación de la Palabra de Dios, y el cuidado de la grey de Dios; y en ningún lado se sugiere ni siquiera la idea de que unos sean superiores a otros, o ejercerían autoridad sobre otros.

El sacerdocio mismo fue abolido por Cristo cuando entró una vez para siempre, con su propia sangre, al lugar Santísimo, donde antes entraba una vez al año el sacerdote de la religión judía (Hebreos 9:11-12).

El Nuevo Testamento, en cambio, establece claramente que los creyentes de esta era no necesitan más de intermediario que los lleve a Dios. Pedro declara, hablando a cristianos: Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable (1 Pedro 2:9). De manera que ahora cada creyente es un sacerdote para sí mismo.

El escritor de la epístola a los hebreos declara también, en base al camino abierto por Cristo: Por tanto, teniendo un gran sumo sacerdote que traspasó los cielos, Jesús el Hijo de Dios, retengamos nuestra profesión. Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero son pecado. Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro (Hebreos 4:14-16).

El rango de superioridad con atribuciones exclusivas del sacerdote católico, es una de las herencias más notables de las antiguas religiones paganas romanas y babilonias traídas a las iglesias antiguas por los inconversos, y es completamente extraño a la enseñanza del Nuevo Testamento. Los bautistas, a través de todos los siglos, siempre se opusieron a tan extraviada idea.

A.           CREEMOS QUE CADA CREYENTE ES SU PROPIO SACERDOTE DELANTE DE DIOS (es decir el Sacerdocio del Creyente):

1)   Cada creyente está en una relación personal con Dios.  Su responsabilidad principal es hacia Dios antes que a otros hombres.

2)   Dios reconoce solamente un Sumo Sacerdote, Jesucristo, que sirve como nuestro MEDIADOR. (1 Tim. 2:5):

a.    Debido a su relación a Cristo, los creyentes son:
§  Piedras (1 P. 2:5),
 §  Linaje (1 P. 2:9), y
§  Reyes y Sacerdotes para Dios (Ap. 1:6).

b.   Debido a que cada creyente es un sacerdote delante de Dios...:

                                       i.     No hay ninguno ________________________ (Rom. 14:12).

                                     ii.     No hay ningún ____________________ (1 Tim.2:5; Heb. 10:22).

                                   iii.     No hay ningún __________________________ (1 Cor. 1:4).
c.    Distingue a los bautistas.

2.5.  Iglesia Cuyos Miembros Son Salvados y Bautizados:

Nadie nace siendo cristiano. Los cristianos bautistas no han aceptado automáticamente en la membresía de sus iglesias, ni a los hijos de sus miembros. Se ha hecho siempre el esfuerzo de asegurarse que los que van a engrosar la lista de membresía sean personas que hayan creído en Cristo para su salvación y den alguna evidencia de ello. Ese es el peligro que se corre en algunas iglesias bautistas modernos de aceptar instantáneamente en la membresía de la iglesia a personas que no tienen más que horas de haber, según ellos, creído en Cristo y sido bautizados.

Cristo sacudió el sistema teológico de Nicodemo con la revolucionaria declaración: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios (Juan 3:3). En el libro de Hechos se nos muestra cómo fue la práctica apostólica de aceptar dentro de la membresía: Así que los que recibieron su palabra fueron bautizados; y se añadieron aquel día como tres mil personas (Hechos 2:41). Y la señal de que habían sido regenerados se mostraba en el siguiente versículo: Y perseveraban en la doctrina de los apóstoles, en la comunión unos con otros, en el partimiento del pan y en las oraciones. (Hechos 2:42)

La entrada a la membresía es por la regeneración, no por herencia, ni por bautismo. Un niño que es bautizado podrá, de acuerdo con la iglesia católica, ser considerado "cristiano", pero de acuerdo con la Biblia. Un cristiano es una persona que voluntariamente ha escogido creer en Cristo como su Salvador; y un bebé es incapaz de hacer esa elección en su temprana edad.

Pablo, en todas sus epístolas, se dirigía a los receptores de las mismas como santos, creyentes, personas que habían sido ya regeneradas, pero nunca como personas que necesitaban ser salvos. Eso significa que las iglesias a las que escribió Pablo estaban formadas solamente por personas que ya habían experimentado el nuevo nacimiento, y habían dado muestras de ello.

Véase Parte IV: