EL LLAMADO, Y COMISIÓN DE EZEQUIEL (III):
(Ezequiel 1:1-28; 2:1-10; 3:1-27)
La Visión De La Gloria Divina:
“Aconteció en el año treinta, en el mes cuarto, a los cinco días del mes, que estando yo en medio de los cautivos junto al río Quebar, los cielos se abrieron, y vi visiones de Dios… En el quinto año de la deportación del rey Joaquín, a los cinco días del mes,… vino palabra de Jehová al sacerdote Ezequiel hijo de Buzi, en la tierra de los caldeos, junto al río Quebar; vino allí sobre él la mano de Jehová… Y miré, y he aquí venía del norte un viento tempestuoso, y una gran nube, con un fuego envolvente, y alrededor de él un resplandor, y en medio del fuego algo que parecía como bronce refulgente,… y en medio de ella la figura de cuatro seres vivientes. Y esta era su apariencia: había en ellos semejanza de hombre… Cada uno tenía cuatro caras y cuatro alas…”.
(Ezequiel 1:1-28; 2:1-10; 3:1-27)
Pastor: Carlos Ramírez Jiménez:
III. LA COMISIÓN DE ZEQUIEL. Ezequiel 3:1-27:
“Me dijo: Hijo
de hombre, come lo que hallas; come este rollo, y ve y habla a la casa de
Israel… Y abrí mi boca, y me hizo comer aquel
rollo… Y me dijo: Hijo de hombre, alimenta tu
vientre, y llena tus entrañas de este rollo que yo te doy. Y lo comí, y fue en
mi boca dulce como miel… Luego me dijo: Hijo de
hombre, ve y entra a la casa de Israel, y habla a ellos con mis palabras…”.
(Ezequiel
3:1-27)
EZEQUIEL
COME EL ROLLO; RECIBE LA COMISION DE IR AL LUGAR DONDE LOS ISRAELITAS ESTAN EN
CAUTIVERIO Y SE VA A TEL-ABIB JUNTO AL QUEBAR. OTRA VEZ VE LA GLORIA DE LA
SHEKINAH. SE LE PIDE RETIRARSE A SU HOGAR Y SOLAMENTE HABLAR CUANDO DIOS LE
ABRA SU BOCA.
V.1. come… y habla—El
mensajero de Dios debe apropiarse para sí la verdad de Dios, antes de “hablar” de ella a otros (Nota, cap. 2:8):
· Las acciones
simbólicas, siempre que era posible y adecuado, eran efectuadas visiblemente;
· de otra manera,
interiormente y en forma de visión espiritual;
· la acción así
narrada hacen que las manifestaciones sea más intuitivas e impresionantes por
presentar el objeto en una forma concentrada e incorporada.
V.3. dulce como miel—Salmo 19:10; 119:103; Ap.10:9, donde,
como aquí en el v. 14, la “dulzura” es seguida
por la “amargura”; “amargo”
por la naturaleza dolorosa del mensaje, pero “dulce”
porque él se hallaba en el servicio del Señor.
El comer el rollo y hallarlo dulce,
significaba que, despojándose a sí mismo de todo sentir carnal, hacía que la
voluntad de Dios fuese la suya propia, por doloroso que fuera el mensaje que
Dios le pidiese que anunciara.
El hecho de que Dios sería así
glorificado, era su mayor placer.
V.5. Véase la
Margen, y el texto hebreo: “profundos de labio y
obscuros de lengua”, es decir, hombres que hablan una lengua obscura e
ininteligible.
Aun éstos habrían escuchado al profeta;
pero los judíos, aun hablándoles en su propio idioma, no querían oírlo.
V.6. muchos pueblos.
Se habría aumentado la dificultad, si
hubiera sido enviado el profeta, no sólo a un pueblo, sino a “muchos pueblos” de
idiomas distintos, lo que habría hecho necesario que el misionero aprendiera
los idiomas respectivos.
Sin embargo la misión posterior de los
apóstoles a muchos pueblos y el don de lenguas para tal fin, se vislumbra ya
aquí, (Véase 1 Cor.14:21, con Isaías 28:11).
Si a ellos te
enviara, ellos te oyeran (Mateo 11:21; 11:23).
V.7. no te querrán oír, porque no me quieren oír a mí (Juan
15:20).
Acepta
con paciencia el que te rechacen porque yo, tu Dios, lo soporto juntamente
contigo.
V.8. Ezequiel quiere decir uno que es “fortalecido por Dios”.
Tal era él en firmeza santa, a pesar de
la oposición de su pueblo, y de acuerdo con el mandamiento divino dado a la
tribu sacerdotal, a la cual Ezequiel pertenecía (Deut.33:9).
V.9. más fuerte que
pedernal.
Así el Mesías, del cual era el anti tipo
(Isaías 50:7; véase Jeremías 1:8; 1:17).
V.10. toma en tu corazón… tus oídos.
La
transposición del orden natural, a saber: recibir
primeramente con los oídos, luego con el corazón, es hecha a propósito. La preparación
del corazón para el mensaje debe preceder a la recepción de este mensaje por
los oídos. (Véase Prov.16:1; Salmo 10:17).
V.11. tu pueblo—que debería tener mejor disposición para
escucharte, siendo tú su compatriota de la que hubiese tenido, de haber sido tú
profeta extranjero (vv. 5, 6).
V.12. (Hechos 8:39).
La residencia de Ezequiel hasta aquel
momento no había sido muy adecuada para su trabajo. Él es guiado, pues, por el
Espíritu a Tel-abib, el pueblo principal de los cautivos judíos, y llegado
allí, se sentó en el suelo, “el trono del miserable” (Ez.9:3; Lam. 1:1-3),
siete días estuvo así el período acostumbrado para el que se manifestaba un
profundo pesar (Job 2:13; véase Salmo 137:1).
Ganando así la confianza de los
exiliados por la simpatía que hacia ellos mostró en su gran tristeza. En su
desplazamiento es acompañado por los querubines manifestados en Quebar (cap.
1:3, 4), después de su partida de Jerusalén.
Ahora se hacen oír, moviéndose con “grande estruendo”
(véase Hechos 2:2), y diciendo: “Bendita sea la gloria de Jehová desde su lugar”,
es decir, moviéndose de donde habían estado junto al Quebar para acompañar a
Ezequiel a su nuevo destino (cap. 9:3), o “desde su lugar” significando más bien “en su lugar y
manifestada desde allí”.
Aunque Dios puede haber abandonado
aparentemente su templo, todavía está en él, y allí restaurará a su pueblo. Su
gloria “es
bendita” en contraste con aquellos judíos que hablaron mal de él,
como si hubiera sido injustamente riguroso con su nación [Calvino].
V.13. se juntaban—literalmente, “se
besaban”, se abrazaban estrechamente.
Sonido de grande estruendo—típico de los
grandes desastres que amenazaban a los judíos.
V.14.
amargura—tristeza a causa de las grandes calamidades que vendrían, de las
cuales era necesario que el profeta fuera mensajero aunque mal recibido.
Pero la “mano” o el impulso poderoso de
Jehová fueron sobre mí.
V.15. Tel-abib—Tel significa elevación; identificada por
Michaels con Thallaba junto al Cabour.
Tal vez el nombre significa las
esperanzas de los judíos en cuanto a su restauración, o también, la fertilidad
de la región. Abib quiere decir las verdes espigas de grano, las que aparecen
en el mes de Nisán, promesa de la cosecha. Asenté—me senté.
Pero
el texto hebreo es más bien: “Los observé sentados allí”
[Gesenius];
o, “Y los que
estaban sentados allí”, etc. es decir, los habitantes más antiguos,
como separados de los llegados recientemente, a los cuales se refiere en la
cláusula anterior.
Las diez tribus hacía tiempo que
habitaban junto al río Quebar o Habor (2 R.17:6). [Havernick].
V.17. atalaya.
Ezequiel solo entre los profetas es
llamado “atalaya”,
no meramente para simpatizar sino para dar en su tiempo la debida advertencia
de peligro a su pueblo donde ellos no esperaban que hubiese peligro. Habacuc (2
R.2:1) habla de “atalayar”,
pero era solamente a fin de estar a la espera de la manifestación del poder de
Dios así como también en Is.52:8; 62:6, no como Ezequiel que debía actuar de
atalaya para los demás.
V.18. amonestares, ni le hablares … sea apercibido—la
repetición hace entender que no es suficiente advertir una vez al pasar, sino
que la advertencia debe ser inculcada continuamente (2 Tim.4:2; “a tiempo y fuera de tiempo”; Hechos 20:31, “día y noche con lágrimas”)., a fin de que viva—El cap.
2:5, aparentemente hacía perder toda esperanza de salvación; pero la referencia
allí tenía que ver con la gran masa del pueblo, cuya situación estaba perdida;
unos cuantos individuos, sin embargo, podían ser reclamados.
Morirá por su maldad (Juan 8:21; 8:24). Los hombres no deben
hacerse la ilusión de que su ignorancia, debido a la negligencia de sus
maestros, los salvará (Rom.2:12, “Los que sin ley pecaron, también sin ley perecerán”)
V.19. impiedad… mal camino—maldad interior del corazón y
externa de la vida, respectivamente.
Habrás librado tu alma (Isaías 49:4-5;
Hechos 20:26).
V.20. cuando el justo se apartare de su justicia—no quiere
decir “justo” en cuanto a la raíz y espíritu de
la regeneración (Salmo 89:33; 138:8; Isaías 26:12; 27:3; Juan 10:28; Filp.1:6)
sino en cuanto a la apariencia exterior y las acciones. Así el “justo” (Prov.18:17; Mateo 9:13).
Así según el v. 19, el ministro debe
llevar a los malos hacia el bien del mismo modo que según el v. 20, debe
confirmar a los que están bien dispuestos a hacer su deber. Hiciere maldad—es
decir darse completamente a la maldad (1 Juan 3:8-9), porque aun los mejores
caen a menudo aunque no voluntaria y habitualmente.
Y pusiere yo tropiezo delante de él—Dios no nos
tienta a pecar (Stg.1:13-14), mas Dios entrega a los hombres a la ceguedad
judicial y a sus propias corrupciones (Salmo 9:16-17; 94:23), cuando “a ellos no les
pareció bien tener a Dios en su noticia” (Rom.1:24; 1:26; 1:28), así
como por el contrario, Dios “endereza el camino del Justo” (Prov.4:11-12; 15:19)
para que no tropiecen.
Calvino refiere “tropiezo” no a la culpabilidad sino
a su castigo; “traeré
ruina sobre él”. El primer significado es el mejor. Acab, después de
cierta forma de justicia (1 R.21:27-29), tuvo una recaída y consultó a
espíritus mentirosos que moraban en los falsos profetas; de modo que Dios
permitió a uno de estos ser su “tropiezo”, tanto para pecar como para su castigo
correspondiente. (1 R.22:21-23). Su sangre demandaré (Heb.13:17).
V.22. la mano de Jehová (cap. 1:3).
Sal al campo—a fin de que allí, en un
lugar solitario, lejos de los incrédulos, pudiera recibir el profeta una nueva
manifestación de la gloria divina que lo animara en su ardua tarea.
V.23. la gloria de Jehová (Cap. 1:28).
V.24. afírmame sobre mis pies—habiendo estado postrado, sin
poder levantarse, hasta cuando fue levantado por el poder divino.
Entra, y enciérrate dentro de tu
casa—dando a entender que en el trabajo que tenía que hacer, no podía esperar
ninguna simpatía de los hombres, sino que debía estar mucho a solas con Dios y
recibir de él su fuerza [Fairbairn]. “No salgas de tu casa mientras yo no te revele el futuro con
señales y palabras”, lo cual Dios hace en los capítulos siguientes
hasta el capítulo once. De esta manera se da una representación de la ciudad
cerrada por el sitio [Grocio] y al mismo tiempo, Dios prueba la obediencia de
su siervo, y Ezequiel demuestra la realidad de su llamamiento procediendo, no
de acuerdo con sus impulsos sino de acuerdo con las direcciones de Dios
[Calvino].
V.25. pondrán sobre ti cuerdas—no literal sino
espiritualmente; la influencia tenaz y deprimente que ejercerían los israelitas
sobre el espíritu del profeta, con su conducta rebelde.
La perversidad de ellos como cuerdas,
reprimiría su libertad en la predicación. Así en 2 Cor.6:12. San Pablo dice
sentirse “estrecho”
porque su enseñanza no les llegaba fácilmente.
También podría haber sido dicho para
consolar al profeta porque estaba encerrado; si hubieras de anunciarles el
mensaje de Dios en seguida, ellos se echarían sobre ti y te atarían con “cuerdas”
[Calvino].
V.26. Haré se pegue tu lengua… estarás
mudo.
Israel había rechazado a los profetas,
por lo tanto Dios priva a Israel de los profetas y de su palabra, lo que sería
el juicio más terrible de Dios (1 Sam.7:2; Amos 8:11-12).
V.27. cuando yo te hubiere hablado, abriré tu boca—contrario
al silencio impuesto al profeta para castigar al pueblo (v. 26).
Después que el intervalo de silencio
haya despertado la atención del pueblo en cuanto al motivo del mismo, es decir,
sus pecados, entonces escucharán quizás las profecías. Lo cual no querían hacer
antes. El que
oye, oiga… cese—es decir, tú has cumplido tu parte, oigan ellos o
dejen de oír. El que se niegue a oír, será para su propio peligro; el que oiga,
será para su bien eterno (Apocalipsis 22:11).
Concluye:
A pesar de que las visiones y profecías
de Ezequiel eran claras y vívidas, se sabe muy poco acerca de la vida personal
del profeta. Estuvo entre los miles de hombres jóvenes que deportaron de Judá a
Babilonia cuando el rey Joacim se rindió. Hasta esos días trágicos, a Ezequiel
lo preparaban para el sacerdocio. Pero durante el cautiverio en Babilonia, Dios
lo llamó para que fuera su profeta durante uno de los momentos más oscuros de
Israel.
Ezequiel experimentó el mismo tipo de
encuentro impresionante con Dios que Isaías narró ciento cincuenta años antes.
Al igual que Isaías, Ezequiel nunca fue el mismo después de su encuentro
personal con Dios. A pesar de que los mensajes de Dios mediante estos dos
profetas tenían mucho en común, las condiciones en las que vivieron fueron muy
diferentes. Isaías advirtió de la tormenta que se acercaba, Ezequiel habló en
medio de la tormenta, de la derrota nacional que devastó a su pueblo. Anunció
que ni siquiera Jerusalén se escaparía de la destrucción. Además, durante este
tiempo, tuvo que resistir el dolor de la muerte de su esposa.
La descripción que da Dios de Ezequiel
como atalaya en los muros de la ciudad ilustra la naturaleza personal de su
ministerio. El trabajo de un atalaya era peligroso. Si descuidaba su puesto, la
ciudad entera y él podían ser destruidos. Su propia seguridad dependía de la
calidad de su trabajo. La importancia de la responsabilidad de cada persona
ante Dios era una parte central del mensaje de Ezequiel. Enseñó a los cautivos
que Dios esperaba obediencia y adoración de cada uno de ellos.
Al igual que en los días de Ezequiel, es
fácil para nosotros olvidarnos que Dios tiene un interés personal en cada uno
de nosotros. Podemos sentirnos insignificantes o fuera de control cuando
miramos los sucesos mundiales. Pero saber que finalmente Dios lo controla todo,
se preocupa y está deseoso de que lo conozcamos, puede darnos un nuevo
propósito en la vida. ¿Cómo mide su valor personal? ¿Es valioso por sus logros
y su potencial, o porque Dios, su Creador y diseñador, declara que usted es
valioso?
Virtudes
y logros:
· Sacerdote por
preparación y profeta por llamado de Dios.
· Recibió visiones
vívidas y proclamó mensajes poderosos.
· Sirvió como
mensajero de Dios durante el cautiverio de Israel en Babilonia.
· Dios moldeó su
carácter para que encajara con su misión: un hombre valiente y fuerte para
alcanzar a un pueblo duro y terco (3:8).
Lecciones de su vida:
· Aun los fracasos
continuos de su pueblo no impedirían que se cumpliera el plan que Dios tiene
para el mundo.
· Es la respuesta
de cada persona a Dios lo que determina su destino eterno.
· En situaciones
de desesperación parecidas a esta, Dios sigue teniendo gente por la cual obrar.
Datos generales:
· Dónde: Babilonia.
· Ocupación: Profeta para los cautivos en Babilonia.
· Familiares: Padre: Buzi. Esposa: Desconocida.
· Contemporáneos: Joaquín, Jeremías, Joacim,
Nabucodonosor
Versículos clave:
"Y me dijo: Hijo de hombre, toma en tu corazón todas mis palabras
que yo te hablaré, y oye con tus oídos. Y ve y entra a los cautivos, a los
hijos de tu pueblo, y háblales y diles: Así ha dicho Jehová el Señor; escuchen,
o dejen de escuchar" (Ez.3:10,
11).
___________
Notas y
Bibliografía:
-e-Sword-the.
LEDD.
-Biblia
De Estudio RYRIE.
-Pastor:
Carlos Ramírez Jiménez. 13//08//2017.
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