sábado, 13 de agosto de 2016

Parte I: El Rapto [Arrebatamiento]: (Hechos 1:6-8; 1 Tesalonicenses 5:1-11; Efesios 5:15-17)

Parte I:
El Rapto [Arrebatamiento]:
(Hechos 1:6-8; 1 Tesalonicenses 5:1-11; Efesios 5:15-17)
Pastor: Carlos Ramírez Jiménez:

“Pero acerca de los tiempos y de las ocasiones, no tenéis necesidad, hermanos, de que yo os escriba Porque vosotros sabéis perfectamente que el día del Señor vendrá así como ladrón en la noche;que cuando digan: Paz y seguridad, entonces vendrá sobre ellos destrucción repentina, como los dolores a la mujer encinta, y no escaparán… Mas vosotros, hermanos, no estáis en tinieblas, para que aquel día os sorprenda como ladrón”.
(1 Ts. 5:1-4)    
Introducción:
ARREBATAMIENTO = [Rapto]. En el Antiguo Testamento nos encontramos con dos casos de personas arrebatadas a Dios:

·      Enoc (Gn. 5:24; Heb. 11:5), y
·      Elías (2 R. 2:11).
Sin ver la muerte.
En el Nuevo Testamento tenemos la promesa del arrebatamiento de los de Cristo en Su venida.
v Primero habrá la resurrección de los muertos «en Cristo», y
v luego todos los creyentes vivos entonces, juntamente con los santos acabados de resucitar, serán arrebatados para recibir al Señor en el aire (1 Ts. 4:16-17).
Este hecho preliminar de la venida del Señor es del mayor de los intereses para la Iglesia, que recibe la instrucción de esperar a su Señor (Tit. 2:11-14). Ahora bien este Gran Evento será antes de la Segunda Venida del Señor a la tierra, la Iglesia será Arrebatada antes de la Gran Tribulación [la tribulación (periodo de 7 años 3/12, 3/12) será la última semana profetizada por Daniel], en lo cual en el aire se encontrara con su Señor.





Existen Tres Posturas Más Acentuadas Dentro De La Iglesia En Cuanto Al Arrebatamiento:
En el siglo diecinueve, la enseñanza concerniente al rapto de la iglesia llegó a estar ampliamente diseminada. Esto hizo surgir tales cuestiones como: si la segunda venida de Cristo abarcaba varias etapas; la relación de esas etapas con el período de la Tribulación; y las distinción de la iglesia en contraste con Israel en el programa de Dios. En el siglo veinte una de las cuestiones más debatidas en la escatología es el tiempo del Rapto.
A esa cuestión los premilenialistas le han dado cuatro respuestas:
·      Los amilenialistas consideran la venida de Cristo como un solo evento que será seguido por la resurrección y el juicio generales.
·      Para los postmilenialistas tampoco hay un rapto distintivo.
·      Los cuatro puntos de vista premileniales son:
v el rapto parcial (es decir, que sólo ciertos creyentes serán arrebatados),
v el rapto pretribulacional,
v el rapto a mitad de la Tribulación, y
v el rapto postribulacional.
El rapto parcial, tiene que ver con el alcance del Rapto, mientras que los otros tres puntos de vista conciernen al tiempo del Rapto. Consideramos que el 70% de la Iglesia está a favor de la postura Premilenial. Un 20% Postmilineal, y 10% Amilenial.

NOTA: Es importante saber que la 2da Venida de Cristo no es el Arrebatamiento de la Iglesia. Son dos eventos distintos:
·      La 2da Venida de Cristo ocurre después de la Gran Tribulación, y
·      el arrebatamiento de la Iglesia ocurre inmediatamente antes de la Gran Tribulación.

El estudio de la profecía y las cosas que han de venir tiene como fin darnos esperanza para el futuro y una perspectiva para el presente. Si estamos confusos en cuanto al plan de Dios, de cómo se va cumpliendo y de Su calendario para la historia humana estaremos desorientados en nuestra vida diaria.
Tenemos que mantener un equilibrio, cuidando de no enfocar de tal manera el futuro que no podamos ver el presente o de estar tan embebidos con el presente que olvidamos el por qué estamos aquí y a dónde vamos.

I.       El Señor Jesús Responde A La Pregunta:

Entonces los que se habían reunido le preguntaron, diciendo:

“Señor, ¿restaurarás el reino a Israel en este tiempo? Y les dijo: No os toca a vosotros saber lo tiempos o las sazones, que el Padre puso en su sola potestad; pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra”. (Hch. 1:6-8)

1.1. Este Diálogo Tuvo Lugar Entre La Resurrección y La Ascensión De Cristo:
El tiempo imperfecto en la frase "le preguntaron" indica que los discípulos seguían haciéndole a Jesús la misma pregunta una y otra vez.
"En este tiempo" es literalmente "en esta era". La palabra traducida "tiempo"[1], chronos, de la cual obtenemos "cronología" es una de las cuatro palabras griegas que significan tiempo. Los discípulos ya comprenden algo acerca de las dispensaciones, y están pensando en la cronología de los hechos.
Ven que la cruz fue seguida por la tumba y la resurrección, y ahora Cristo ha estado con ellos casi 40 días y lo que están diciendo es esto: "En vista de que ya moriste en la cruz, pagaste por nuestros pecados y diste salvación, en vista de esa cronología, ¿restaurarás ahora el reino a Israel? "Restaurar" significa "volver a poner una cosa en aquel estado o estimación que antes tenía". Los discípulos se refieren a las promesas del Antiguo Testamento que declaraban que el Mesías establecería un reino que nunca sería sacudido.
Tienen en mente el Pacto Davídico de 2 Samuel 7:10-16 donde un reino eterno, un trono eterno y una posteridad eterna le fueron prometidos a David. Están listos para que Jesús, a quien reconocen como el Mesías prometido, saque a los romanos y establezca ahora mismo el reino sobre la tierra.

Pero su manera de pensar tiene una falla. Los discípulos no han alcanzado a captar el hecho de que estos últimos 40 días Jesús ha estado hablando no del "reino de Israel", sino del "reino de Dios" (Hch. 1:3). Y éstas son dos cosas distintas.
El Hijo de David había venido y se había ofrecido a los judíos como el Mesías, como su rey, pero lo rechazaron (Mt. 23:39). El establecimiento del reino de Israel ahora demoraría, al iniciar Dios algo totalmente inesperado.
Las profecías de Daniel habían dado a entender que habría alguna especie de rotura en la cronología de la historia de Israel, que habría un período de tiempo entre la primera y la segunda venida del Mesías (Dn. 9:26). Ese período de tiempo es la Era de la Iglesia, en la cual se va estableciendo el reino de Dios.

Este reino, que Jesús empezó a introducir en el Discurso del Aposento Alto, era de lo que trataba de hablarles a Sus discípulos desde Su resurrección. Es un reino espiritual, uno en el cual entramos en el instante que depositamos nuestra fe en Jesucristo: "Mas a todos los que le recibieron,. . .les dio potestad de ser hechos hijos de Dios" (Jn. 1:12). "De modo que", explicaría más adelante Pablo, "si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas" (2 Cor. 5:17).
En respuesta a las preguntas de los discípulos sobre la restauración del reino de Israel, Jesús usa el negativo enfático para decirles que no les incumbe en absoluto saber "los tiempos o las sazones, que el Padre puso en su sola potestad". La palabra traducida "puso", títemi, se refiere a algo que ha sido puesto en cemento. Dios ha puesto en cemento el plan de la historia humana, lo ha puesto por Su propia autoridad.

Dios tiene un plan para la historia, pero Jesús le dice a Sus seguidores que no necesitan ocuparse del asunto en ese momento. Lo que necesitan enfocar es el hecho de que pronto recibirían el poder del Espíritu Santo. Por Hechos 2 sabemos que el Día de Pentecostés el Espíritu Santo descendió e hizo Su residencia en cada creyente en el Señor Jesucristo. Había empezado una nueva era.

“Pero acerca de los tiempos y de las ocasiones, no tenéis necesidad, hermanos, de que yo os escriba. Porque vosotros sabéis perfectamente que el día del Señor vendrá así como ladrón en la noche; que cuando digan: Paz y seguridad, entonces vendrá sobre ellos destrucción repentina, como los dolores a la mujer encinta, y no escaparán.
Mas vosotros, hermanos, no estáis en tinieblas, para que aquel día os sorprenda como ladrón, porque todos vosotros sois hijos de luz e hijos del día; no somos de la noche ni de las tinieblas. Por tanto, no durmamos como los demás, sino velemos y seamos sobrios.
Pues los que duermen, de noche duermen, y los que se embriagan, de noche se embriagan.
Pero nosotros, que somos del día, seamos sobrios, habiéndonos vestido con la coraza de fe y de amor, y con la esperanza de salvación como yelmo.
Porque no nos ha puesto Dios para ira, sino para alcanzar salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo, quien murió por nosotros para que ya sea que velemos, o que durmamos, vivamos juntamente con él. Por lo cual animaos unos a otros, y edificaos unos a otros, así como lo hacéis”. (1 Ts. 5:1-11).

En Hechos 1:7 Jesús les dijo a los discípulos enfáticamente que no les tocaba a ellos saber los tiempos y las sazones que Dios había puesto.

II.     El Apóstol Pablo Define El Tiempo Del Señor:
Veinte años después, Pablo, escribiendo de los mismos tiempos y sazones, el cronos y kairos, la cronología y las épocas fijadas, indica que los creyentes de Tesalónica sabían "perfectamente". El griego oida es la palabra que significa un conocimiento completo, pleno, maduro. Akribos significa "con exactitud, con precisión".

¿Por qué los discípulos en Hechos 1 no saben y el pueblo en Tesalónica sabe perfectamente? Porque en los años que mediaron, el Espíritu Santo reveló al apóstol Pablo el bosquejo del plan de Dios para la historia.

El Día del SeñorEl Día de Cristo:
A. "El Día del Señor" es una expresión característica del Antiguo Testamento. Es el tema de muchas profecías, por ejemplo en pasajes como Isaías 2:17, 13:6-9; Joel 3:1, 2, 14; Zacarías 14:1- 9; y Malaquías 4:1, 2:
1. El día del Señor era un día rodeado de misterio en cuanto a cuando ocurriría. 1 Pedro 1:12 nos dice que los profetas del Antiguo Testamento hacían muchas investigaciones tratando de saber cuándo ocurriría.
2. El día del Señor era un día futuro, todavía lo es.
3. El día del Señor era principalmente un día de juicio. Cada pasaje indica que será un acontecimiento muy terrible. Cuando el día del Señor llegue será la hora más tenebrosa de la historia humana.
4. Los sucesos que se relacionan con el día del Señor, tanto las profecías en el Antiguo Testamento, como en el libro del Apocalipsis, lo identifican como la Tribulación. Sabemos por una multitud de Escrituras que la Tribulación durará siete años y que esta etapa entera se llama el día del Señor.
5. El día del Señor muestra a Jesucristo viniendo en son de venganza. Primero vino como el Cordero de Dios; en el día del Señor regresará como el León de la Tribu de Judá. Vendrá con una espada en Su mano para ejecutar el juicio.

B. "El día de Cristo" es un término característico del Nuevo Testamento que se encuentra en pasajes como Filipenses 1:6; 1 Corintios 1:8, 5:5; 2 Corintios 1:14:
1. El día de Cristo es el día cuando todo se completa para los que creen. Es el día cuando alcanzamos nuestro objetivo.
2. El día de Cristo es un día de confirmación. Ese día sabremos total y absolutamente que realmente tenemos vida eterna.
3. El día de Cristo es el día cuando los creyentes son declarados sin culpa en Cristo, Puede que no estemos sin culpa ahora, pero estaremos sin culpa para siempre en Su presencia.
4. El día de Cristo es un día de salvación y gozo.
5. No habrá condenación en el día de Cristo.

Sólo a Pablo le fue dada la revelación completa del "misterio" de la Era de la Iglesia, la singularidad de su lugar en las dispensaciones de Dios y la singularidad de las providencias divinas dadas a todos los creyentes de la Era de la Iglesia.
Pablo no está diciendo que estas personas sabían exactamente cuándo regresaría el Señor, nadie sabe el día ni la hora [como si lo hacen los adventistas y Testigos de Jehová, entre otros grupos]. Pero les está recordando que sí saben el orden de los acontecimientos.
Notemos: la distinción que recalca en este pasaje entre "ellos" y "vosotros" o sea, nosotros. Pablo recalca dos diferencias importantes en 1 Tesalonicenses.
Ø Una es entre dos diferentes tipos de personas: "ellos" y "vosotros".
Ø La otra entre dos diferentes días: "el día de Cristo" y "el día del Señor":
·      A: "El día de Cristo" descrito en 1 Tesalonicenses 4:13-18*, es el Rapto de la Iglesia. Sucederá en un segundo, en un abrir y cerrar de ojos (1 Cor. 15:51), y será un día de bendición para todos los que creen.
·      B: "El día del Señor" descrito en 1:10 y 5:1-11 es la Tribulación. Durará siete años y será un tiempo de ira y juicio para los que no creen.

NOTA. *1 Ts. 4:16-17: Trompeta. Compare 1 Corintios 15:52. Los muertos en Cristo. Resucitarán primero, cuando el Señor Venga a Recoger a Su pueblo (v.17). Entonces los creyentes que vivan serán “arrebatados”. Del latín rapiemut viene el término “rapto” o “arrebatamiento” de la Iglesia. El arrebatamiento descrito aquí, comprende tanto a los creyentes que hayan muerto como a los que todavía vivan cuando el Señor Venga. Esta Venida será en el aire, no a la tierra, y sucederá justamente antes del comienzo del período de la Tribulación (compare Apocalipsis 3:10). Este período terminará cuando Cristo Venga a la tierra (compare Mateo 24:29-30; Apocalipsis 19:11-16).
1 Ts.5:18: El ánimo que proporcionará al cristiano su esperanza en la Resurrección está en agudo contraste con la desesperanza de los paganos = [aquellos que se resisten en creer en Cristo y prefieren a los ídolos] cara a la muerte.
En su discusión del día del Señor, Pablo muestra las diferencias entre "ellos" y "nosotros". "Ellos" estarán diciendo "paz y seguridad" y serán tomados por sorpresa por una destrucción repentina que "vendrá sobre ellos… como los dolores de la mujer encinta".
Jesús describió estos "dolores de parto" en Mateo 24 y 25. Dijo a Sus discípulos que aunque no supieran el día y la hora de las cosas que pronto sucederían, podrían reconocer el tiempo y debían estar alertas y estar prevenidos cuando éste se acercara. Como los dolores de parto, dijo, las señales aumentarían en intensidad. Guerra, rumores de guerra, hambre, terremotos en muchos lugares, todas estas cosas comenzarían en pequeño y como incidentes aislados y se harían más y más intensos y sucederían más y más cerca el uno del otro.

El "parto" es la liberación de los hijos de Dios. Cristo vendrá y llamará a Su familia sacándola de este mundo en el Rapto. Este acto, en el día de Cristo, dará comienzo al día del Señor. Por eso Pablo puede decir que lo que le sucede a ellos no nos sucederá a nosotros. Sobre ellos vendrá una destrucción repentina, y ellos no escaparán, pero no nos alcanzará a nosotros. No nos tiene que preocupar porque no somos de la oscuridad, sino de la luz.

Ya que todo esto está por suceder, no debemos dormir, sino estar alertas y sobrios. Cuando Pablo habla en 1 Tesalonicenses 4 de los que "duermen"[2], usó la palabra koimao que significa "acostarse o tomarse un descanso", para referirse a la muerte del creyente.
Aquí usa kateudo, que significa "estar inconsciente, abstraído". Dormir, en este sentido, es no ver, o ver y no entender lo que sucede todo a nuestro alrededor. Esta es una figura que representa estar fuera de comunión, o espiritualmente inconscientes.





Tiempo:
l
Era de los Gentiles:
De Adán a Abraham
II
Era de los Judíos:
De Abraham a Pentecostés/ /
Del Rapto a la Segunda Venida
III
Era de la Iglesia:
De Pentecostés al Rapto
IV
Era del Milenio:
1,000 Años: De la Segunda Venida al Gran Trono Blanco del Juicio
Pasaje Bíblico:




Progreso de la Era:

Génesis 1-11




El Edén



De la Caída al Diluvio

Del Diluvio a Babel



Génesis 12 - Evangelios/ /
Mateo 24-25 - Apocalipsis 6-19

Patriarcas: De Abraham a
Moisés

Ley: De Moisés a Cristo

Tribulación: Del Rapto a la
Segunda Venida

Hechos 2 - Apocalipsis 4



Pre-canon: De Pentecostés a la terminación de Apocalipsis



Post-canon: De Terminación de Apocalipsis al Rapto
Apocalipsis 20:1-6
Isaías 11,12,52,60



Regreso de Cristo y Satanás atado

Reinado perfecto de Cristo



Satanás suelto y sublevación final
de él y los incrédulos
Responsabilidad:
De Dar a Conocer
la Palabra de Dios:

Sobre todas las
familias—
en esta era había una raza y una lengua. Los patriarcas de cada familia tenían el
cargo de evangelizar.

Sobre una nación: Israel—
Después de Babel había muchas razas y lenguas. Por medio de Abraham, Dios creó a Israel como un nueva raza y
comisionó a la nación para evangelizar.
Sobre un cuerpo:
la Iglesia—
Con la creación de la Iglesia fue creada una nueva
especie. En esta era hay sólo dos clases de personas:
creyentes e incrédulos. Cada
cristiano es un embajador.
Sobre una persona: Cristo el Rey-
Todos lo conocerán. "Daré mi ley en su mente, y la escribiré en su
corazón" (Jr. 31:33).

Revelación de la
Palabra de Dios
al Hombre:

No había Palabra
escrita—La Palabra de Dios se comunicaba
oralmente por medio de los patriarcas de cada
familia.

Las Escrituras reveladas y
escritas por individuos desde
Moisés a Malaquías y los
autores de los Evangelios. El
Antiguo T.
completado para el año 400 a. de C.
El Nuevo Testamento
revelado a y escrito por apóstoles y profetas. El canon
de las Escrituras fue completado para el año 96 d. de C. y permanecerá para siempre.

Revelación total en la presencia de la Palabra Viviente, el Señor Jesucristo.

Forma de
Salvación:

Por fe en Cristo, la
simiente prometida de la mujer (Gn. 3:15; Job19:25-27)

Por fe en Cristo, el Mesías Prometido (Gn. 15:6; Salm. 21-22; Prov. 30:4; Is. 53)
Por fe en Cristo, el Señor resucitado (Hech. 16:31; Ef.
2:8,9)

Por fe en Cristo, el rey reinante (Heb. 8:8-13)




Ver Parte II:


No hay comentarios.:

Publicar un comentario