viernes, 26 de agosto de 2016

Parte II: LA DOCTRINA DEL ESPÍRITU SANTO: (Hechos 5:3)

Parte II:
LA DOCTRINA DEL ESPÍRITU SANTO:
(Hechos 5:3)

Pastor: Carlos Ramírez Jiménez:

“Y dijo Pedro: Ananías, ¿por qué llenó Satanás tu corazón para que mintieras al Espíritu Santo, y sustrajeses del precio de la heredad?”.
(Hechos 5:3)

¿Sigue lo que vemos en Hechos 8 el patrón de “Después, evidencias y Esperar”? Vamos a ver:

1- ¿Vino el Espíritu Santo después de nacer de nuevo? . Recibieron el Espíritu Santo después de ser Salvos. Explicaré porqué después.
2- ¿Hablaron en lenguas como evidencia de tener al Espíritu Santo? No se menciona que hablaron en lenguas cuando recibieron el Espíritu Santo. Tampoco se menciona que hablaron en lenguas en el relato de la conversión de los 3,000 (Hechos 2:41) ni cuando muchos creyeron y su número llegó a 5,000 hombres (Hechos 4:4).
3- ¿Tuvieron que esperar, pedir y deseas con anhelo el bautismo del Espíritu? NO. Cuando los apóstoles impusieron las manos, recibieron el Espíritu Santo al instante sin ningún esfuerzo propio.

HECHOS 10:
Hechos 10: Narra algo semejante, pero en este caso los primeros gentiles llegaron al evangelio. Cornelio, un romano, pero hombre piadoso y temeroso de Dios, estaba orando a Dios y de repente un ángel le dio instrucciones para mandar a llamar a Pedro el apóstol. El Espíritu Santo le dijo a Pedro: “He aquí, tres hombres te buscan. Levántate, pues, y desciende y no dudes de ir con ellos, porque yo les he enviado” (Hechos 10:19-20).
Aunque esto violaba la enseñanza de su Crianza Religiosa Judía, Pedro obedientemente fue con los mensajeros. Les acompañó solamente porque Dios le había hablado tan claramente y le había mostrado en una visión que no debía despreciar a los gentiles.
Sin embargo, para mayor seguridad, llevó consigo a varios hermanos para servir de testigos es esta obra que sin duda iba a ser mal interpretada por algunos. Pedro llegó y entró en la casa (también prohibido para los judíos), y pregunto por qué le habían mandado a llamar. Al escuchar la respuesta de Cornelio. Pedro, asombrado afirmó: “En verdad comprendo que Dios no hace acepción de personas” (Hechos 10:34).
Pedro les predicó un bello mensaje de la Buenas Nuevas de Jesús [Resucitado] y antes de terminar fue interrumpido porque “el Espíritu Santo cayó sobre todos los que oían el discurso” (Hechos 10:44). La evidencia del derramamiento del Espíritu Santo era una de las tres del día de Pentecostés: hablar en lenguas.
¿Cuál fue la reacción de los que acompañaron a Pedro? “Se quedaron atónitos de que también sobre los gentiles se derramará el don del Espíritu Santo” (v.45). 

Es interesante notar la reacción de los Judíos creyentes de Judea, cuando oyeron lo que había pasado. “¿Por qué has entrado en casa de hombres Incircuncisos, y has comido con ellos?” (11:3). Pedro les contó todo lo que había pasado: la visión, el Espíritu instruyendo a acompañar a los mensajeros, la reunión en la casa de Cornelio y todo. Cuando ellos escucharon que hablaron en lenguas, éste fue la evidencia que los convenció a ellos, tal como había convencido a Pedro, de que también los gentiles podrán ser cristianos.
“Entonces, oídas estas cosas, callaron, y glorificaron a Dios, diciendo: ¡De manera que también a los gentiles ha dado Dios arrepentimiento para vida!” (11:18).

Seguimos comparando lo que sucedió con la doctrina de “después, evidencias y esperar”:
1- ¿Vino el Espíritu Santo después de nacer de Nuevo? NO. Recibieron al Espíritu Santo al mismo instante de ser Salvos.
2- ¿Hablaron en lenguas como evidencia de tener al Espíritu Santo? , hablaron en lenguas.
3- ¿Tuvieron que esperar y desear con anhelo el bautismo del Espíritu? NO. No tuvieron que pedir ni esperar el recibimiento del Espíritu Santo. Aun antes de que Pedro termina de predicar, recibieron el Espíritu Santo.

Ahora Unas Preguntas Interesantes:
¿Por qué tuvieron que llegar los apóstoles de Jerusalén a Samaria en HECHOS 8? ¿No era capacitado Felipe? ¿Había algún problema o desventaja en ser samaritano? ¿Por qué le obligó el Espíritu Santo al apóstol Pedro a ir a la casa de Cornelio?
Para entender bien por qué sucedió así, es necesario comprender cuán exclusivos eran los judíos. Se sentían superiores a las demás razas. Ellos creían que Dios los quería únicamente a ellos. Para ellos, los samaritanos eran una raza odiada, cuya religión era una mezcla de verdad y paganismo. Para los judíos, los gentiles eran una raza aún más inferior y despreciable. Se relacionaban con ellos lo menos posible.
El judío no comía la carne que un carnicero gentil preparara. Si un judío venía de territorio gentil, sacudía sus zapatos al llegar a su propia tierra para quitar el polvo gentil. La mujer gentil, al entrar a un pueblo judío, según ellos, hacía inmundo todo el pueblo. Y así siguen los ejemplos.
Las profecías decían claramente que los gentiles iban a estar incluidos en los pueblos de Dios (Gn.12:3 por ejemplo); la enseñanza de Jesús (Juan 10:16) y su manera de tratar a los que no eran judíos era muy diferente de como lo hacía el judío. Aun así, los nuevos cristianos judíos no podían creer que Dios en verdad acepta a los gentiles de la manera misma que los había aceptado a ellos.
Hay por lo menos dos motivos claro por qué Dios mandó a Pedro y a Juan a Samaria (Hechos 8) y por qué Pedro fue enviado a casa de Cornelio (Hechos 10). Las razones son las mismas:
1) Primero, un motivo principal era para que los que no eran judíos reconocieran la autoridad y la posición de los apóstoles judíos.
2) Segundo, para que la Iglesia (hasta entonces sólo de judíos) y los mismos apóstoles reconocieron que los creyentes samaritanos y gentiles eran iguales a ellos. Si no habían hablado en lenguas estos gentiles al principio de esta época, los judíos siempre se habían creído superiores a ellos. Siempre había creído que los cristianos de otras nacionalidades son cristianos de segunda categoría.

HECHOS 19:
Hechos 19: Es el cuarto y último pasaje que se usa frecuentemente para comprobar la doctrina que ahora estamos analizando. Vamos a ver qué pasó.
Sigue el desfile de personas en transición. Estos eran discípulos de Juan que no había escuchado nada de Jesús. Había sido bautizado como muestra de arrepentimiento por sus pecados tal como Juan el Bautista había enseñado.

Todavía Esperaban Al Mesías De Que Juan Había Profetizado:
-          ¿Recibisteis el Espíritu Santo cuando creísteis?, preguntó Pablo.
-          Ni siquiera hemos oído si hay Espíritu Santo, respondieron.
-          ¿Qué tipo de bautismo recibieron, entonces?, insistió Pablo.
-          El bautismo de Juan, dijeron.

Ahora Pablo entendió el problema; les hacía falta algo. Necesitaban conocer[4] y creer en Jesús, el Mesías. Al oír de Jesús, ellos se bautizaron en su nombre. “Y habiéndose impuesto Pablo las manos, vino sobre ellos el Espíritu Santo; y hablaban en lengua, y profetizaban” (Hechos 19:6).

¿Qué de la doctrina de “Después, Evidencias y Esperar”?
1- ¿Vino el Espíritu Santo después de nacer de nuevo? NO, porque no habían nacido de nuevo todavía. Ni habían conocido a Jesús [Conocer es aceptar en este caso, y los demás después de la Resurrección del Señor].
2- ¿Hablaron en lenguas como evidencia del Espíritu Santo? SÍ, hablaron en lenguas.
3- ¿Tuvieron que esperar y desear con anhelo el bautismo del Espíritu? NO, cuando Pablo les impuso las manos, de inmediato recibieron el Espíritu Santo.

Debemos notar que Pablo no les habló de otro paso, ni de una espiritualidad más profunda, ni aun de recibir al Espíritu Santo. Les habló de Cristo. Creyeron y fueron bautizados. Inmediatamente recibieron el Espíritu Santo. ¿Por qué les impuso las manos Pablo? ¿Por qué hablaron en lenguas estos discípulos de Juan el Bautista si la gran mayoría de los cristianos nuevos bajo el ministerio de Pablo no hablaron en lenguas? Pablo les impuso las manos y Dios hizo que hablaran en lenguas para mostrarles que ya no debía seguir las enseñanzas de Juan el Bautista, sino que debían seguir las enseñanzas de Jesús y los apóstoles.
Quizás usted, mi estimado consiervo o alumno se está preguntando: “¿Y qué es tan importante son estas diferencias de doctrina? ¿No son detalles pequeños de poca importancia?”. Yo insisto que las diferencias son muy importantes y estrategias. Lo que creemos acerca del Espíritu Santo afectará hoy cómo vivimos la vida cristiana. Un ejemplo, nada más: La doctrina errónea que evaluamos enseña que uno puede ser cristiano y vivir una vida mediocre sin evidencia del Espíritu Santo en la vida. Esto no es posible (Romanos 8:9). Además, la Biblia nunca da esperanza para los que andan mediocres (Apocalipsis 3: 15-16).

IV.    ¿Cuál Es La Obra Del Espíritu Santo En El Incrédulo?

EL Espíritu Santo Convence Al Pecador De Su Pecado.
Si no fuera por Él, los incrédulos siempre seguirán negando su pecado. Solamente el Espíritu Santo puede producir en ellos reconocimiento de su necesidad de un Salvador. Los cristianos hablan, evangelizan y predican, pero el Espíritu Santo tiene que tomar la Palabra de Dios y Aplicarla al corazón del Incrédulo.
Juan 16:8-11 dice: “Y cuando Él (el Espíritu Santo) venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio. De pecado, por cuanto no creen en mí; de justicia, por cuanto voy al Padre, y no me veréis más; y de juicio, por cuanto el príncipe [el diablo] de este mundo ha sido ya juzgado”.

Tres Verdades Sobresalen Aquí:
-      El Espíritu Santo nos convence que somos pecadores,
-      que Dios es Juez Justo, y
-      que el pecado será castigado.

4.1.   EL ESPÍRITU SANTO GUÍA AL INCRÉDULO AL ARREPENTIMIENTO:
El arrepentimiento es sentir una profunda tristeza por nuestro pecado. Incluye confesarlo a Dios y tener tal odio hacia el pecado que estamos dispuestos a hacer lo que sea para no volverlo a cometer. Aunque el arrepentimiento[5] es una decisión que le incrédulo tiene que tomar el Espíritu Santo le ayude a llegar al punto de sentirse tan hastiado de su pecado que se arrepiente y buscar a Dios.

4.2.   EL ESPÍRITU SANTO REGENERA LOS CORAZONES:
La regeneración es “hacer de nuevo”. Tito 3:5-6 dice: “Nos salvó… por el lavamiento de la regeneración y por la renovación en el  Espíritu Santo”. Hablando de esta misma verdad, Juan 3:3-5 lo llama “nacer de nuevo” o ser hechos nuevos.

Ejemplos:
-Carlos, era esclavo de los vicios de tomar licor y fumar.
-Estela, no podía vencer el enojo y la gritería.
-Celedonio, se sentía incapaz de dejar la amargura que sentía contra sus padres.
-Amador, no podía dejar el pecado de la fornicación aunque sabía que lo estaba destruyendo.
Carlos, Estela, Celedonio, Amador, y muchos más testifican que Dios los cambio y les ha dado deseos puros. Solamente el Espíritu Santo puede cambiar a tales personas y darles deseos nuevos y el poder de dejar el pecado totalmente.

V.     ¿Cuál Es La Obra Del Espíritu Santo En El Creyente?:

El Espíritu Santo Mora En Cada Creyente Verdadero Y Le Da Testimonio De Ser Hijo De Dios Romanos 8:9-16; Efesios 1:13-14.
El Espíritu Santo usa la Palabra de Dios para confirmarnos que somos sus hijos. Si hemos cumplido las condiciones bíblicas para se ser Salvos el Espíritu Santo nos da la bendita confianza que Dios cumplirá sus promesas.

5.1.   EL ESPÍRITU SANTO NOS CONSUELA:
Nunca nos abandona (Juan 14:16-18). Bien recuerdo una crisis familiar hace varios años tras los problemas [con el nacimiento de unos de mis hijos], cuando una operación y la columna y una enfermedad de mi esposa el problema me aplastaba. Oraba y oraba hasta que no hallé cómo orar más.  En mi angustia lloré a Dios sin hallar palabras. Sentí claramente que el Espíritu Santo comunicaba mi petición a Dios. El Espíritu Intercede por nosotros los creyentes cuando no sabemos cómo orar agobiado por las dificultades que pasamos en el momento (Romanos 8:26-27) y nos consuela.

5.2. EL ESPÍRITU SANTO NOS ENSEÑA VERDADES ESPIRITUALES, ILUMINANDO NOS LAS SAGRADAS ESCRITURAS JUAN 14:26; 1 CORINTIOS 2:13:
Cuántas veces no entendemos el significado de una cierta porción de la Biblia. Oramos a Dios, pidiendo que ÉL nos aclare su significado. La volvemos a leer, estudiamos el contexto y comparamos la porción con otros pasajes de la Biblia. De repente notamos algo que nos facilita entender el pasaje. La respuesta estaba allí todo el tiempo, pero fue necesaria la iluminación del Espíritu Santo para hallarla.
EL nos trae a la memoria verdades de la Biblia que son aplicables a las situaciones que enfrentamos a diario, y nos enseñó cómo vivir y luchar contra el diablo de acuerdo a la Palabra de Dios.

5.3.  EL ESPÍRITU SANTO NOS GUÍA ROMANOS 8:14; Hechos 13:2; 16:6-7; Gálatas 5:18:
A veces nos habla claramente como lo hizo a Pedro, Felipe y otros miembros de la Iglesia Primitiva. Más frecuentemente la dirección del Espíritu Santo nos llega a través de una voz suave y tierna (1 Reyes 19:12). Nos dice algo así: “Comparte tu testimonio con la cajera”. “Ve a visitar al hermano Celedonio; él está desanimado”. “Debes pedirle perdón a tu esposa por las palabras ásperas que le hablaste por la mañana”.
El Espíritu Santo también nos enseña cómo orar y nos trae a la memoria personas, situaciones y necesidades especiales por las cuales debemos orar.
Todos conocemos personas que no pudieron (o no quisieron) distinguir entre sus propios deseos y la voluntad de Dios. Muchos escándalos y problemas se le han culpado a Dios con decir: “El Espíritu me dijo lo hiciera”.

Un principio digno de toda nuestra confianza es: El Espíritu Santo nunca nos dirige en contra de los principios de la Palabra de Dios. Si escuchamos una Voz o un Orador Elocuente que nos Incita a Desobedecer la Biblia, tenlo por seguro que no Viene del Espíritu Santo. Dios nos está probando para saber si le Obedecemos a Él y si de verdad le amamos con todo nuestro corazón y alma (Deuteronomio 13:1-3).

5.4.  EL ESPÍRITU SANTO FORTALECE AL CREYENTE CON PODER HECHOS 1:8: 1 Corintios 2:4:
Muchas veces cuando hablo con algún inconverso y le invito a conocer cuán bello es la vida cristiana, me responde: “Nunca podría vencer mis vicios. No puede vivir la vida cristiana”.
Yo les digo: “Tiene toda la razón. Usted no puede por sí mismo. Pero cuando el Espíritu Santo entra en su vida, él le da poder para vivir como le agrada a Dios”.
Este poder del Espíritu Santo nos capacita para testificar a los incrédulos (Lucas 12:12; Hechos 1:8; 4:31). Su Poder hace posible la vida victoriosa sobre el pecado. También hace que podamos servirle al Señor en la Iglesia con eficacia (Efesios 4:11, 12: 1 Corintios 2:4; 12:11).

5.5.  EL ESPÍRITU SANTO PRODUCE EN NOSOTROS SU FRUTO GÁLATAS 5:2-23:
Dice: “Más el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley”. El fruto del Espíritu son aquellas virtudes auténticas que sólo Él puede producir en nuestras vidas.

5.6.   EL ESPÍRITU SANTO DA DONES ESPIRITUALES PARA EL PROVECHO Y EL CRECIMIENTO DE LA IGLESIA 1 Corintios 12:11:
En los próximos estudios queremos hacer una comparación y un contraste entre los dones del Espíritu y el fruto del Espíritu
Por supuesto, la obra del Espíritu Santo en nuestras vidas depende de nuestra entrega al Señor. El espera nuestra obediencia. Hechos 5:32 claramente dice: “… el Espíritu Santo, el cual ha dado Dios a los que le obedecen”.

¡Cuán importante es la obra del Espíritu Santo hoy en día! ¿Dónde estaría el pecador sin Él? ¿Qué esperanza tuviera? ¿Dónde estaría el creyente sin el Espíritu Santo? ¿Cómo pudiera vivir, vencer y llegar al cielo? Agradezcamos a Dios por su don inefable. Rindamos nuestras vidas a él para que lleve a cabo su obra en nosotros libremente. ¡No hay nada más hermoso en la vida!
Cuando usted piensa en el Espíritu Santo, ¿en qué piensa primero, en el fruto o en los dones? La mayoría de la gente hoy en día les da más importancia a los dones. De veras los dones son importantes y vamos a hablar acerca de ello. Pero es un gran error ignorar el fruto. Por eso, en el siguiente tema enfocaremos el fruto del Espíritu Santo.

VI.    ¿Qué Es El Fruto[6] Del Espíritu?:


El fruto del Espíritu es la diferencia que el Espíritu Santo hace en el carácter del cristiano. Es el carácter santo que resulta en la vida diaria por el control del Espíritu Santo. La frase “Fruto del Espíritu” viene de Gálatas 5:22-23, donde Pablo dice: “Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza, contra tales cosas no hay ley”. También se pudiera decir: “Más el resultado de tener el Espíritu es…”.
Vamos  a ver más de cerca estas cualidades de carácter que estarán en la vida de todo cristiano verdadero:
-      AMOR: Es buscar el bien del otro sin esperar nada en recompensa. Es más que una emoción, es una decisión.
Etimología: G26 ἀγάπη = agápe: de G25; amor, i.e. afecto o benevolencia; específicamente (plural) festín de amor:- ágape, amado, amor. (Strong).
-    GOZO: Es una perspectiva positiva y un sentido de bienestar que no depende de las circunstancias a nuestro alrededor. Alegría, al contrario, es lo que se siente cuando las cosas salen a nuestro favor.
Etimología: G5479 χαρά = jará: de G5463; alegría, i.e. deleite calmo:- alegría, gozo, gozoso. (Strong).
-       PAZ: Es una quietud, un descanso y una calma en medio de circunstancias difíciles. Es lo opuesto al afán.
Etimología: G1515 εἰρήνη = eirene: probablemente de un verbo primario εἴρω = eiro  (unir); paz (literalmente o figurativamente); por implicación prosperidad:- paz. (Strong).
-   PACIENCIA: Es la capacidad de no enojarse. Es poder mantener control sobre las emociones aun cuando todo parezca estar en mi contra.
Etimología: G3115 μακροθυμία = makrodsumía: de lo mismo que G3116; longanimidad, i.e. (objetivamente) soporte, aguante o (subjetivamente) paciencia:- paciencia, longanimidad, clemencia. (Strong).
-       BENIGNIDAD: Es ser cariñoso y amable siempre. La benignidad busca oportunidades de hacer obras de cariño a los demás.
Etimología: G5544 χρηστότης = jrestótes: de G5543; utilidad, i.e. excelencia moralmente (en carácter o presencia):- benignidad, bondad, bueno. (Strong).
-   BONDAD: Es tener un buen corazón y estar deseoso de hacer lo bueno cuando haya oportunidad.
Etimología: G19 ἀγαθωσύνη = agadsosune: de G18; bondad, i.e. virtud o beneficencia:- bondad. (Strong).
-         FE: En el griego, significa ser fiel o de  confianza. Es cumplir con las promesas que hemos hecho a Dios y a los hombres aunque nos cueste.
Etimología: G4102 πίστις = pístis: de G3982; persuasión, i.e. credibilidad; moralmente convicción (de verdad religión, o la veracidad de Dios o de un maestro religioso), específicamente confianza en Cristo para salvación; abstractamente constancia en tal profesión; por extensión, el sistema de verdad religiosa (evangelio) en sí mismo:- fe, fidelidad, fiel, gracia. (Strong).
-   MANSEDUMBRE: Es ser apacible, dócil y humilde. No viene de debilidad sino de confianza en Dios. Es no ser provocado fácilmente. Es lo opuesto a ser egoísta o de exigir los derechos.
Etimología: G4236 πρᾳότης = praótes: de G4235; gentileza, por implicación humildad:- mansedumbre. (Strong).
-      TEMPLANZA: Es dominio propio. Los apetitos y carnales no le dominan a uno cuando tiene templanza.
Etimología: G1466 ἐγκράτεια = enkráteia: de G1468; dominio propio (específicamente continencia, templanza):- dominio (propio), templanza. (Strong).

Donde se ven obvias estas nueve [9] características del fruto en la vida diaria, es evidencia indiscutible de la presencia del Espíritu Santo

No hay muchos frutos, sino diferentes aspectos del mismo fruto. Estas manifestaciones no se pueden separar la una de la otra. Van juntas y están entretejidas. Por ejemplo, si verdaderamente amo; el gozo y la paz también serán evidentes en mi vida. Si tengo templanza, por supuesto tendré paciencia.

Jesús también usó la palabra “fruto” en su discurso en Juan 15:1-6 cuando él dijo: “Yo soy la vid verdadera, y mi Padre es el labrador. Todo pámpano que en mí no lleve fruto, lo quitará; y todo aquel que lleva fruto, lo limpiará, para que lleve más fruto… Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí. Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto, porque separados de mí nada podéis hacer. El que en mí no permanece será echado fuera como pámpano, y se secará; y los recogen, y los echan en el fuego, y arden”.
Aquí Jesús enseña que el fruto procede de la vid (Jesucristo) por la savia (el Espíritu Santo). El fruto no es tanto el resultado de grandes esfuerzos nuestros (de los pámpanos), sino que es el resultado de mantener una relación estrecha con Jesucristo (la vid). Por obedecer cuidadosa y constantemente la Biblia, la Palabra de Dios, demostraremos que sin duda somos guiados por el Espíritu Santo.
El fruto del Espíritu no se puede fingir. En Mateo 7:15-20 Jesús nos advierte del peligro de los falsos profetas. El falso profeta aparenta ser una oveja legítima del redil del Señor, pero realmente por dentro es un lobo rapaz cuya meta y placer es despedazar a las ovejas. Si el falso profeta tiene la misma apariencia externa que el hermano legítimo, ¿cómo podemos conocerlo? “Por sus frutos los conocéis” (Mateo 7:16).
En Lucas 6:45 Jesús dijo: “de la abundancia del corazón habla la boca”. Lo que está adentro sale en forma de la palabra y hechos. El falso profeta no demostrará el fruto del Espíritu en su vida privada. En la vida del cristiano la prueba de la espiritualidad se ve más por el fruto del Espíritu que por los dones se pueden falsificar pero el fruto sólo el Espíritu Santo lo puede producir. Así es que usted, mi hermano, debe enfocar en permanecer en la vid y rendir su vida a Cristo para que este fruto milagroso brote de su vida. A usted también lo conocerán por su fruto.

VII.  ¿Qué Son Los Dones Del Espíritu?:

Los dones del Espíritu son habilidades dadas por el Espíritu Santo a los cristianos. El los da para glorificar a Dios y para edificar a la iglesia.
Analicemos brevemente la enseñanza del apóstol Pablo en 1 Corintios 12 referente al uso y al propósito de los dones espirituales:
-   PRIMERO: Los dones[7] espirituales son importantes. Pablo no quiere que seamos ignorantes de ellos (v.1).
-         SEGUNDO: Los dones espirituales legítimos glorifican a Jesús y le reconocen como Señor (vv.2-3). Anteriormente observamos que no se puede fingir el FRUTO del Espíritu. Pero los dones sí pueden ser fingidos. Nosotros tenemos la tendencia a creer que cualquier manifestación sobrenatural viene de Dios. Pero ¡no es cierto! 1 Juan 4:1 dice: “Amados, no creáis a todo espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios; porque muchos falsos profetas han salido por el mundo”. Hay espíritus malos y hay un Espíritu Santo. Las manifestaciones a veces pueden ser parecidos, porque Satanás trata de imitar lo verdadero para engañar al pueblo de Dios (2 Tesalonicenses 2:9-10).
-          TERCERO: Hay muchos diferentes dones espirituales, pero el mismo Dios, por medio del Espíritu Santo, los coordina a todos (vv. 4, 6, 12, 14). No es correcto estar disconformes con los dones que hemos recibido. El Espíritu Santo decide cuáles dones recibe cada uno (v.11).
Si Dios es quien decide cuáles dones tiene cada uno, ¿cabe la idea común de pedir un cierto don destacado? Nuestro enfoque debe ser en desarrollar los dones que el Espíritu nos dio y no en pedir lo que nos parece del “catálogo” de los dones. Necesitamos los diferentes dones para la iglesia funcione bien.
-    CUARTO: Los dones espirituales son para el provecho de toda la iglesia (v.7). Note: También 1 Corintios 14:5, 12, 19. En la mente de Dios los dones más deseables son los que edifican a la Iglesia.
-          QUINTO: No debemos creernos inferiores ni superiores por los dones que tengamos o no tengamos. Con tales actitudes mostraríamos que no hemos entendido cómo el cuerpo de Cristo (vv.15, 16, 21). Es una gran equivocación pensar que no valemos en la Iglesia porque no tenemos un don visible.
El ejemplo del cuerpo humano aclara bien esta verdad. ¿Será que el hígado es sin importancia porque nadie lo ve? ¡Pregúntele a una persona que sufre problemas del hígado! No, cada miembro es importante. Algo marcha mal si usamos los dones para exaltarnos a nosotros mismos. Eso muestra que no hemos entendido de dónde vienen los dones. Realmente no tenemos nada que ver con cuál don espiritual recibimos. Pablo en 1 Corintios 4:7, deja bien clara esta verdad.
Al preguntar: “Porque ¿quién te distingue? ¿O qué tienes que no hayas recibido? Y si recibiste, ¿por qué te glorías como si no lo hubieras recibido?”.
-   SEXTO: Los dones espirituales que parecen ser más débiles (de menos importancia) realmente son más necesarios (vv.22-24). Todos tenemos por lo menos un don espiritual. Si no fuera así, Pedro no nos habría instruido: “Cada uno según el don que ha recibido, ministrelo a los otros…” (1 Pedro 4:10).
-          SEPTIMO: No hay un don específico que todos tendrán. “A unos puso Dios en la Iglesia, primeramente apóstoles, luego profetas, lo tercero maestro, luego los que hacen milagros, después lo que sanan, los que ayudan, los que administran, los que tienen tiene don de lenguas. ¿Son todos apóstoles? ¿Son todos profetas? ¿Todos maestros? ¿hacen todos milagros? ¿tienen todos dones de sanidad? ¿hablan todos lenguas? ¿interpretan todos?” (vv.28-30). Esta verdad fue tan clara y tan sencilla que Pablo ni se preocupó por contestar las preguntas. En su mente la respuesta negativa era obvia.
-          OCTAVO: La única manera correcta de emplear el don espiritual es usarlo en amor (12:31; 13:1-3).
-  NOVENO: Un propósito sobresaliente para los dones espirituales es que no haya desavenencia (o divisiones) en el cuerpo (vv.25-26). Es sumamente hermoso ser parte de la hermandad cristiana si reconocemos que yo necesito de mis hermanos y que ellos necesitan de mí.

Véase Parte III:

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