viernes, 26 de agosto de 2016

Parte III: LA DOCTRINA DEL ESPÍRITU SANTO: (Hechos 5:3)


Parte III:
LA DOCTRINA DEL ESPÍRITU SANTO:
(Hechos 5:3)

Pastor: Carlos Ramírez Jiménez:

“Y dijo Pedro: Ananías, ¿por qué llenó Satanás tu corazón para que mintieras al Espíritu Santo, y sustrajeses del precio de la heredad?”.
(Hechos 5:3)

Aunque mis dones no parecen ser muy significantes, sin embargo, contribuyen mucho a la vida de los hermanos. No hay porqué sentir que no me necesitan. Aun si fuéramos dotados, siempre necesitamos sujetarnos al consejo de la hermandad. Así evitaremos el ser engañado. Esto también nos ayudará a no justificarnos en nuestras pequeñas faltas que con el tiempo podrían llegar a hacerse grandes.

Repase de nuevo estos nueve puntos de enseñanza. ¡Cuántos problemas, pecados, divisiones y malos entendidos evitaremos en la iglesia si nos guiamos por lo que Dios nos enseña en su palabra!

VIII. ¿Cuáles Son Los Peligros De Un Mal Concepto De Los Dones Espirituales!:

1- Subrayar los dones y dejar en segundo lugar el fruto del Espíritu. Esto sería dar un énfasis equivocado en “hacer” más que en “ser”. Algo marcha mal si en nuestras vidas y en nuestras iglesias se enfoca más en tener ciertos dones que en vivir una vida santa y llena del fruto del Espíritu.
2- Buscar los dones más sobresalientes en vez de desarrollar los dones  que Dios ya nos ha dado. Dios es quien da los dones. En el estudio anterior vimos que los dones no son dados según nuestro ruegos, oraciones y ayunos, sino como Dios quiere.
3- Usar los dones para exaltarnos a nosotros mismos. A mí me duele cuando veo grandes carteles anunciando que el Gran Predicador y Sanador “fulano” estará predicando en el pueblo. Yo me pregunto: “¿Dónde está el enfoque, en el predicador o en Jesucristo?”. En Mateo 6, tres veces Jesús nos advierte que las actividades religiosas para exaltar a los hombres no valen ante los ojos de Dios. Los que dan limosnas (v.1, 2), los que oran (v.5) y los que ayunan (v.6) para impresionar a los hombres como su única recompensa.
4- Fingir tener dones espirituales, utilizando habilidades humanas o poderes sobrenaturales que no son de Dios. En un ambiente donde  se insiste que la espiritualidad se puede medir por tener  cierto don, no es de extrañarse de que las personas en desesperación acuden a medios anti bíblicos para lograr “el don”.
La técnica de vaciar la mente, esperando “la plenitud” del Espíritu es sumamente peligrosa. Satanás ha tomado ventaja de muchas personas cuando ellas se han abierto de esta manera.
5- Pensar que si tenemos dones sobrenaturales no hay tanta necesidad de vivir en santidad. Este peligro es el más preocupante. "Tengo el don de sanar; esto demuestra que estoy bien espiritualmente”. Dice alguien. Otro dice: “Dios está usándome en la obra. Desempeñó una posición importante en las iglesias. Hay personas que están convirtiéndose por mi ministerio. Así que, el pecado pequeño que tengo escondido aparentemente no es tan grave. Es claro que Dios siempre me apoya”. Pero, ¿qué dijo Jesús en Mateo 7:21-23? “No todo el que me dice: Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos. Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? Y entonces les declararé: Nunca os conocí apartaos de mí, hacedores de maldad”.
Note la seriedad de estas palabras. ¿Se fijó que estas personas habían profetizado, habían echado fuera demonios y habían hecho milagros?

¿Notó que lo habían hecho en el nombre de Jesús? ¿No ve, mi apreciado lector, que estas personas sinceras se extrañaron, porque en su mente no había duda alguna de su destino eterno? ¿Qué había pasado? ¿Cómo fueron engañados?

Satanás, el gran engañador, es capaz de dar habilidades semejante a los dones espirituales para confundir a las personas, así no es evidente el dominio del Espíritu Santo en nuestra manera de ser, si, no se observa el FRUTO DEL ESPÍRITU SANTO en nuestras vidas diarias, aunque hagamos obras religiosas y milagrosas, estamos en peligro. Si no somos obedientes a todos los Mandamiento de las Escrituras, el Señor Jesús nos advierte que tendremos una sorpresa desagradable en el día del juicio.

IX.    ¿Qué Significa Andar En El Espíritu?:

Andad…[8] (Gál.5:16). El verbo griego que es traducido “andad” está en el tiempo presente y significa: seguir andando continuamente.
NOTA: V.16: La respuesta al testimonio que estaban dando en la carne era caminar en el Espíritu (v. 16). Pablo había dicho a los cristianos de Galacia que por fe habían recibido el Espíritu Santo (Gál.3:2; 3:5), ahora les dice que anden por el poder del Espíritu Santo. Andad está en el tiempo presente que indica algo continuo o un estilo de vida que es habitual. El camino del Espíritu es uno de libertad y de amor. El contraste al caminar en el Espíritu es el satisfacer la carne.

Es una condición que se tiene que mantener constantemente. Quiere decir dar un paso tras otro bajo el control y la dirección del Espíritu Santo todo el tiempo. “Andar en el Espíritu” no tiene que ver tanto con la madurez espiritual, como con la manera que vivo en cada momento. Tampoco tiene que ver con cuántos años tengo de ser cristiano.
Por ejemplo, si uno ha sido un cristiano fiel por cincuenta años, pero un día desobedece la voz del Espíritu, en ese momento no está “andando en el Espíritu”. Si hace cinco minutos nació de nuevo una persona por entregar su vida al Señor, el Espíritu Santo ya mora en su persona (Romanos 8:9).
NOTA: V.9: si es que. I, es puesto que. No hay duda en la afirmación de Pablo: los que pertenecen a Cristo tienen el Espíritu Santo.
Si le obedece ahora, entonces en este preciso momento está “andando en el Espíritu”. Esto debe llegar a ser un habitó y puede llegar a ser una manera de vivir. La madurez cristiana es aprender a obedecer al Espíritu Santo más constantemente.
Yo sé lo que es tener un tiempo agradable de oración y estudio de la enseñanza de la Biblia ni con la realidad. Nuestro problema no es que nos hace falta algo más para vivir la vida cristiana. El problema es que no hemos aprendido a “andar en el Espíritu”.
… en el Espíritu”. El Espíritu Santo. El Espíritu Santo mora en cada cristiano nacido de nuevo. Esta doctrina básica nos enseña que debemos permitir que Él nos dirija en las decisiones diarias. Cuando nosotros respondemos a los impulsos del Espírito Santo con obediencia sincera y pronta, estamos “andando en el Espíritu”. “Andar en el Espíritu” subraya nuestra dependencia del poder y la dirección del Espíritu Santo, no de ninguna otra cosa.
Efesios 5:18 dice: “No os embriaguéis con vino, en lo cual hay disolución; antes bien sed llenos del Espíritu”. Pablo usa el  tomar vino como un ejemplo de ser controlado por algo malo. Tomar licor lleva a “disolución” o desenfreno y falta de autocontrol. Fácilmente se puede notar el cambio de comportamiento en el hombre o mujer que toma licor. El actúa bajo el control del vino; pierde control de sus facultades.
De la misma manera, es evidente el control del Espíritu Santo cuando yo le entrego mi cuerpo. Esto se manifiesta por el FRUTO DEL ESPÍRITU en mi vida (Gálatas 5:22-23). “Sed llenos[9] del Espíritu” es un mandamiento. Dios espera que yo voluntariamente ceda el control de mi cuerpo a Él (Romanos 6:12-13). “Andar en el Espíritu” incluye dos fases:
-      Recibir instrucción, y
-      obedecerla.
Tengo que entender que Dios quiere que yo haga antes que lo pueda hacer. Él no nos habla en voz alta, sino a través de pensamientos que llegan a nuestra mente. Pero, ¿cómo puedo reconocer la voz del Espíritu Santo? ¿Cómo hago para no confundirme con lo que no es del Espíritu?
Podré saber con seguridad que el Espíritu Santo nunca me dirige en contra de lo que enseña la Santa Biblia. El mismo Espíritu Santo que inspiró la Biblia es el que mora en mí. Él nunca cambia. Jamás ha cambiado ni cambiará.

En nuestro esfuerzo por ser sensitivos al Espíritu Santo, pueda ser que sintamos un impulso o una idea que es contrario a lo que la Biblia nos manda. Tales pensamientos no vienen de Dios. Conocer bien la Biblia nos es una ayuda. Es como un filtro de protección para discernir cuáles impulsos vienen de Dios y cuáles vienen de nosotros mismos, o peor, ¡de Satanás! Debemos resistir todo pensamiento que no concuerda con la Santa Biblia (Santiago 4:7).
Debemos estudiar la Biblia a fondo para conocer la voluntad de Dios. En la Biblia encontramos principios de cómo Dios desea que vivamos. Para poder agradar a Dios debemos conocer bien la Biblia.

¿Cree usted que debiera orar y ayunar para saber si Dios quiere que yo robe la motocicleta de mi vecino? ¡Claro que no! Y ¿qué del hombre que deja a su esposa y se casa con otra porque “el Espíritu Santo me dijo que lo hiciera”? ¿O que me case con una mujer casada, o con una joven; etcétera…?
¿Está bien eso? ¡Por supuesto que no! En casos como éstos, ya está clara la voluntad de Dios, porque está escrita en la Biblia. No hay por qué pedir una Revelación Especial.

“y no satisfagáis los deseo de la carne”. Aquí no está hablando de cuerpo físico. Al contrario, se refiere a nuestra naturaleza no regenerada que todos nosotros recibimos desde que Adán y Eva pecaron. Esta naturaleza no Regenerada no quiere obedecer a Dios. “Andar en el Espíritu” es una lucha; no es fácil, ni automática.
Mi naturaleza carnal resiste la dependencia de Dios (Romanos 8:6-8). Busca ser independiente y autosuficiente. “Andar en el Espíritu” es resistir y dominar esos deseos de la carne.

NOTA: Romanos 8:4-8: Aquí el  contraste es entre vida dominada por la carne (i., es, la naturaleza pecadora que hay dentro) y una vida controlada por el Espíritu Santo.

Debo presentar mi cuerpo al Señor limpio y puro. “Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional” (Romanos 12:1). Si tengo amargura o rencor, si rehusó perdonar, si he pecado y no he confesado, ni lo he dejado, ni he hecho restitución, no puedo esperar que Dios me muestre su voluntad, ni que Él use mi cuerpo para su servicio.
Yo sé que hay decisiones que tenemos que tomar para las cuales no hay un versículo de la Biblia que dice claramente cuál es la voluntad de Dios. Por ejemplo: La Biblia no dice dónde debo vivir, o cómo debo casar. En los casos cuando la Biblia no nos da dirección específica seguimos con la próxima pregunta.

X.     ¿Cómo Se Anda En El Espíritu?:

Para descubrir la voluntad de Dios, la persona tiene que querer saber y querer hacerla. Dios no revela su voluntad a las personas que se reservan el derecho de decidir si le obedecerán o no. A veces nos parece ser muy complicado hallar la voluntad de Dios. Nuestro problema no es tanto que no podemos descubrir su Voluntad, el problema es que tenemos miedo de lo que pudiera incluir someternos completamente a ella.
Cuando yo no tengo preferencia propia, podrá estar accesible a lo que Dios me quiera mostrar. Mientras yo todavía tengo una fuerte preferencia personal de lo que yo quiero que sea la voluntad de Dios, bien me podría engañar a mí mismo. Yo pudiera estar tratando de convencerme a mí mismo que lo que yo quiero también es la voluntad de Dios.
Conozco a una señora a quien le encanta ir al mercado de artesanía porque allí se puede negociar. La vendedora dice, el chaleco de moda vale S/. 100.00 nuevos soles. Ella se muestra sin interés y dice que es muy caro. Pide una rebaja.
Algunas personas tratan de hacer lo mismo con Dios. Piden una “rebaja”, o sea que la Voluntad de Dios sea menos rigurosa. Tratan de “negociar” con Él. Ofrecen más, prometen orar más, hablan de ser misioneros u obreros con tal que Dios les permita hacer lo que ellos tanto desean. Para algún joven pudiera ser casarse con una novia mundana [o viceversa] con la bendición de Dios.
Para otros pudiera ser seguir estudiando en la universidad. Para otro, ir a trabajar en la ciudad. Otra persona ofrece orar más para no sentirse obligado a ofrendar tanto. Pero no, con Dios no se puede negociar. Él que  insiste en seguir su propio camino, saldrá dañado.
Si queremos andar en el Espíritu, desearemos invitar al control del Espíritu Santo en nuestro cuerpo y en nuestra mente. Él espera una entrega voluntaria.

XI.    ¿En Síntesis El Espíritu Santo Es?:

Una respuesta a los Testigos de Jehová y a las otras sectas que niegan que sea una persona el Espíritu Santo, ya que lo consideran una fuerza sin voluntad, entre otros puntos; ni tampoco está sujeto a la voluntad humana como lo hacen los actuales profetas, apóstoles, etcétera…, “como algunos dicen yo te ordeno Espíritu Santo que los sanes…., que los llenes…”, ambos grupos no se dan cuenta cuantas blasfemias hacen contra ÉL.

11.1.  El Espíritu Santo Es:


1- Es una Persona: Cuando encontramos en las Escrituras una mención al Espíritu Santo siempre le antecede el artículo “El”, porque es una persona.

Como persona: Habla (Hechos 13:2).
 Ordena (Hechos 16:6-7).
 Guía (Juan 16:13).
 Intercede (Romanos 8:26).
 Testifica (Juan 15:26).
 Encomienda (Hechos 20:28).

2- Es Dios: En el idioma hebreo cuando la Biblia se refiere a Dios usa la palabra Elohim ésta palabra es plural, en la lengua hebrea existe tres números gramaticales: singular (uno), dual (dos) y plural (más de dos). Existen algunas palabras donde se indica la pluralidad de personas en la Unidad: Padre, Hijo, y Espíritu Santo:
Génesis 1:26: Hagamos,… nuestra. (Génesis 3:22… Nosotros.
Génesis 11:6-7: Descendamos, confundamos… Isaías 6:8. Nosotros.

11.2.  Lo Que El Espíritu Santo, Hizo Y Hace:
1- De la Creación Hasta Belén.
a. Se mostró activo en la Creación. Génesis 1:1.
b. Dio vida al hombre. Génesis 2:7.
c. Es Creador de la vida. Salmo 104:30.
d. Tomaba posesión de algunas personas para librar y hablar a su pueblo Jueces 3:10; 6:24…
2- De Belén hasta Pentecostés.
Su actuación se concretó en la persona del Señor Jesús:
a. Fue concebido por el Espíritu Santo. Lucas 1:33.
b. Fue bautizado por el Espíritu Santo. Juan 1:32, 33.
c. Fue guiado por el Espíritu Santo. Lucas 4:1.
d. Fue ungido por el Espíritu Santo. Lucas 4:18.
e. Fue ofrecido como expiación de nuestros pecados por el Espíritu Santo. Hebreos 9:14.
f. Fue resucitado por el Espíritu Santo. Romanos 8:11.
3- De Pentecostés a la fecha.
a. En el Mundo.
1) Vino para convencer al mundo de pecado de justicia y de juicio (Juan 16:7-11).
NOTA: VV. 8-11: El Espíritu Santo, mediante apóstoles, evangelistas y predicadores, convencerá al mundo. Convencer significa proclamar la verdad del evangelio con una luz tan clara, que los hombres sean capaces de aceptar o rechazar inteligentemente; i., es, dejarlos convictos de la veracidad del evangelio. El Espíritu ayudará a quebrantar la indiferencia del típico pagano que no tiene convicción de pecado, que abriga muy poco respeto en lo concerniente a la justicia, y que no atiende a las advertencias del juicio venidero.
2) Vino para detener el crecimiento de la iniquidad, hasta que sea quitado de en medio. 2 Tesalonicenses 2:7.
3) Vino para actuar en la vida del creyente. Mateo 5:13-14.
b. En la Gloria.
1) La Iglesia llego hacer por el Espíritu Santo (1 Corintios 12:13, 14).
2) Dios vive en la Iglesia por medio del Espíritu Santo. (Efesios 2:22).
3) El otorgamiento de los dones a los hijos de Dios es hecho por el Espíritu Santo. (Efesios 4:14).
c. En la Vida Del Creyente.
1) El Espíritu Santo esclarece la mente del Cristiano (1 Corintios 2:10).
2) El Espíritu Santo mora en el cuerpo de los cristianos (1 Corintios 6:19).

11.3. EL BAUTISMO DEL ESPÍRITU SANTO:
Es un tema que tiene diferentes opiniones, que muchas veces llegan hacer causa de divisiones en el cuerpo de Cristo, [la Iglesia].
Pero debemos considerar que la acción del Espíritu Santo no es dividir.
Algunos cristianos que el bautismo del Espíritu Santo ocurre solamente después de la conversión y que solamente después de ésta experiencia, la persona puede ser plenamente utilizado por Dios, otros piensan y argumentan que la persona que es bautizada por el Espíritu Santo da la evidencia a través del don de lenguas o de algún otro don.
Esta experiencia es llamada por unos henchimiento, o llenura y por  otros bautismo del Espíritu Santo, existe un llamado o un mandato para buscar esta “experiencia” acompañado de algún don. NO.

Existen si dos [2] llamados que deben preocupar nuestra atención la:
- La Primera: La referencia a la Gran Comisión de Mateo 28:16-20. Que tiene que ver con el evangelismo y el discipulado y la;
- La Segunda: que va ligada a la primera.
“… Como hijos obedientes, no os conforméis a los deseos que antes temáis estando en vuestra ignorancia; sino como aquel que os llamó es Santo, sed también vosotros santos en toda nuestras manera de vivir, porque escrito está; sed santos, porque yo soy santo” 1 Pedro 1:14-16.
Sin una vida en santidad no tendremos autoridad para proclamar a un Dios que puede transformar vidas, ni tendremos autoridad para ejercer un discipulado serio que tenga la calidad de un hijo de Dios, como la experiencia del apóstol Pablo quien decía “sed imitadores de mí, como yo de Cristo”. 1 Corintios 11:1.

Existe en todo el Nuevo Testamento siete pasajes que hablan del bautismo con el Espíritu Santo:
1- Mt. 3:11; Mr.1:7-8; Lc.3:16; Jn.1:33; en la cual se refiere a un acontecimiento futuro Hechos 1:4-5.
2- Un sexto pasaje alude a un hecho experimentado en el día del Pentecostés. Hechos 11:15-17.
3- El séptimo pasaje habla de una amplia experiencia para todos los creyentes. 1 Corintios 12:13.

11.4. SUCESOS QUE ACOMPAÑAN NUESTRA SALVACIÓN Y EL ESPÍRITU SANTO:
1- El Sello Del Espíritu Santo: La Escritura declara de que cuando creímos, fuimos Sellados por el Espíritu Santo de la Promesa. Efesios 1:13; 4:30.
El Sello cumple dos funciones: de seguridad y la de pertenencia.
a. Seguridad: El apóstol Pablo se refiere a esto cuando dice que ni la muerte, ni la vida, ni ángel, ni potestades, ni principados, ni lo presente, ni lo porvenir, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios. Romanos 8:38, 39.
El Antiguo Testamento y el Nuevo señalan esta palabra “sello” identificando que nadie ni nada puede revocar o invalidar lo que fue sellado, estudie (Mateo 27:65, 66).
b. Pertenencia: o certificado de propiedad cuando alguien compraba algo ponía su sello para identificar luego que era de su propiedad.
¡Así pues somos propiedad de Dios para siempre!

2- Las Arras: Mencionado en 2 Corintios 1:22 y Efesios 1:14, son llamados también como “garantía” o “prenda” en los tiempos del Nuevo Testamento la prenda o el arras significaba tres cosas:
-      Primero: Era pago al contado que sellaba una transacción comercial.
-      Segundo: Representaba obligación a comparar.
-   Tercero: Era una muestra de lo que habría de venir el NT., refiere tres veces ésta palabra:
a. 2 Corintios: Lo que trata de decir el apóstol Pablo es que el Espíritu Santo en nuestras vidas es la garantía de que Dios cumplirá sus promesas.
b. 2 Corintios 5:5: Sugiere que el Espíritu Santo en nuestras vidas es la garantía de Dios, de que recibiremos cuerpos celestiales a la venida de Cristo.
c. Efesio 1:14: El Espíritu Santo es la prenda de Dios que nos garantiza nuestra herencia de la total Redención. (Efesio 1:7*).
NOTA: *V.7: Redención: Tres ideas están implicadas en la doctrina de la Redención:
1) el pago del rescate con la sangre de Cristo (1 Corintios 6:20; 1 Pedro 1:18-19; Apocalipsis 5:9;
2) La retirada de la maldición de la ley (Gálatas 3:13; 4:5); y
3) Liberación de la esclavitud del pecado para entrar en la libertad de la gracia (1 Pedro 1:18).
La Redención es siempre por su sangre; i., es, mediante la muerte de Cristo (Colosenses 1:14).

3- El Testimonio Del Espíritu Santo:
a. El Espíritu Santo nos da testimonio, y es suficiente para nosotros la Muerte Expiatoria de Jesucristo. Hebreos 10:15-17.
b. El Espíritu Santo, nos muestra que por la fe en Jesucristo y en su Obra Expiatoria hemos sido hechos hijos de Dios. Romanos 8:16.
c. El Espíritu Santo certifica la verdad de que todas las promesas que Dios nos ha dicho es verdad. Juan 16:13.

¡Oh, que pudiéramos aprender el gozo y la alegría de ser guiados por el Espíritu Santo en cada momento Él nunca abandona!

Siempre nos acompaña. ¡Que Dios le bendiga ricamente en sus esfuerzos para “andar en el Espíritu”, acompañado y confirmando por un amplio conocimiento de la Biblia! Esto es mi deseo para usted, mi estimado consiervo.

Veamos Tres Gráficas: Bautismos - Llenura, La Unidad De Dios:

BAUTISMO:
LLENURA:
OCURRE SOLO UNA VEZ EN LA
VIDA DE CADA CREYENTE
ES UNA EXPERIENCIA QUE SE REPITE
NUNCA OCURRIÓ ANTES DEL DIA
DE PENTECOSTES
OCURRIÓ EN EL ANTIGUO TESTAMENTO

EXPERIENCIA DE TODO CREYENTE
NO NECESARIAMENTE EXPERIMENTADO POR TODOS
NO SE PUEDE DESHACER
SE PUEDE PERDER
RESULTA EN UNA POSICION
RESULTA EN PODER
OCURRE CUANDO CREEMOS EN
CRISTO
OCURRE A TRAVÉS DE LA VIDA CRISTIANA

NINGÚN REQUISITO PREVIO (EXCEPTO
LA FE EN CRISTO)
DEPENDE DE LA SUMISIÓN








Veamos algo interesante de la Unidad de Dios:

Ontológicamente:
Dios Padre: Tiene su propia personalidad.
Dios Hijo: Tiene su propia personalidad.
Dios Espíritu Santo: Tiene su propia personalidad.

Teológicamente:
El Padre envía:--------à
Al Hijo, para dar su vida por el rescate de la humanidad, y regresar al hombre así ÉL.

El Hijo envía: -------à
Al Espíritu Santo: Para convencer al hombre de su pecado, y guiar al cristiano en toda verdad.

Ahora bien en este punto no hay quien es mayor, es solo los designios de Dios para que se cumpla sus planes de la Redención del ser humano, pero un solo Dios.


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Notas y Bibliografía:
[1] G846 αὐτός = autos: αὖ = au  [tal vez afín a la base de G109 con la idea de un viento desconcertante] (hacia atrás) pronombre reflexivo sí mismo, usado (solo o en el Compare G1438) de la tercera persona, y (con el pronombre pers. apropiado) de las otras personas:- estas cosas, uno mismo, él, él mismo, ella mismo, este mismo, el mismo. Compare G848. (Strong).
G3588 ὁ = jo: incluido el femenino ἡ = jé y el neutro τό = tó en todas sus inflexiones; artículo def.; el, la, lo (a veces suplido, otras veces no, en el español):- cosa, el, este, ese, quien, uno. ὅ = jó. Véase G3729. (Strong).
[2] G3875 παράκλητος = parákletos: intercesor, consolador:- abogado, consolador. (Strong).
[3] G4151 πνεῦμα = pneúma: de G4154; corriente de aire, i.e. respiración (soplo) o brisa; por analogía o figurativamente un espíritu, i.e. (humano) el alma racional, (por implicación) principio vital, mentalmente disposición, etc., o (sobrehumano) ángel, demonio, o Dios (divino), espíritu de Cristo, el Espíritu Santo:- aliento, espíritu, espiritual, viento. Compare G5590. (Strong).
G40 ἅγιος = jágios: de ἅγος = jágos  (cosa terrible) [Compare G53, H2282]; sagrado (físicamente puro, moralmente sin culpa o religioso, ceremonialmente consagrado):- santísimo, santo, santa. (Strong).
[4] epistamai = (ἐπίσταμαι, G1987), conocer, saber, entender; probablemente voz media arcaica de efistemi, establecer sobre. Se usa en Marcos 14:68: «sé», que sigue a oída, no le conozco; con mayor frecuencia en Hechos (Hech.10:18; 15:7; 18:25; 19:15; 19:25; 20:18; 22:19; 24:10; 26:26) y otros pasajes (1 Tim.6:4; Heb.11:8; Stg.4:14; Jud.1:10). En la mayor parte de los casos se traduce con el verbo «saber»; con el verbo «conocer» se traduce en Hech.18:25 y Judas 1:10: Véase SABER. (Vine).
[5] ARREPENTIR (SE), ARREPENTIMIENTO:
A. Verbos:
1. metanoeo = (μετανοέω, G3340), lit: percibir posteriormente (meta = después, implicando cambio; noeo = percibir; nous = mente, el asiento de la reflexión moral), en contraste a pronoeo, percibir de antemano. Significa, por ello, cambiar de opinión o el propósito, y en el NT., involucra siempre un cambio a mejor, una enmienda, y siempre, excepto en Lucas 17:3-4, de arrepentimiento del pecado. La palabra se halla en los Evangelios Sinópticos (en Lucas, nueve veces), cinco veces en los Hechos, doce veces en Apocalipsis, ocho en los mensajes a las iglesias (Lucas 2:5, dos veces, 16, 21, dos veces, «no quiere arrepentirse»; Lucas 3:3; 3:19; las únicas iglesias en este capítulo que no reciben exhortación a este respecto son las de Esmirna y Filadelfia); el único otro pasaje en que se halla es en 2 Cor.12:21. Véase también la nota general más abajo.
2. metamelomai = (μεταμέλομαι, G3338), (meta, como en el Nº 1, y melo, tener cuidado de), se usa en la voz pasiva en sentido de voz media, significando lamentar, arrepentirse en Mateo 21:29, «arrepentido»; en el v. 32. no «os arrepentisteis»; en 27:32: «arrepentido»; en 2 Cor.7:8, dos veces: «no me pesa»; (rv: «no me arrepiento»); «lamenté» (rv: «arrepentí»); y en Heb.7:21 , el único pasaje del NT., en que se usa (negativamente) de Dios. Véanse PESAR, LAMENTAR.
B. Adjetivos:
1. ametanoetos = (ἀμετανόητος, G279), lit: sin cambio de mente o de opinión (a, negativo, metanoeo = cambiar de opinión o de parecer; meta, significando cambio; nous = mente). Se usa en Rom.2:5, «no arrepentido». Moulton y Milligan muestran de los escritos en los papiros que la palabra se usa también «en un sentido pasivo, no afectado por un cambio de mente, como ametameletos en Rom.11:29»: «sin arrepentimiento».
2. ametameletos = (ἀμεταμέλητος, G278) , no arrepentido de, sin lamentarse (a , negativo, y un adjetivo verbal de A, Nº 2). Significa «sin cambio de propósito». Se dice. (a) De Dios con respecto a sus dones y el llamamiento, «irrevocables» (rvr); «sin arrepentimiento» (rv); (b) del hombre (2 Cor.7:10, «arrepentimiento». metanoia, véase C) «de que no hay que arrepentirse»; la diferencia entre metanoia y metamelomai, aquí ilustrada, se expresa brevemente en el contraste entre arrepentimiento y lamentación.
C. Nombre:
metanoia = (μετάνοια, G3341) , pensamiento posterior, cambio de parecer, arrepentimiento. Se corresponde en significado a A, Nº 1, y se usa del arrepentimiento del pecado o del mal, excepto en Heb.12:17 , donde la palabra «arrepentimiento» parece significar, no simplemente un cambio de parecer de parte de Isaac, sino tal cambio que revertiría los efectos de su anterior estado de mente. La primogenitura de Esaú no podía ser devuelta, implicaba una pérdida irrevocable.
Por lo que respecta al arrepentimiento del pecado, (a) se expone la demanda de parte de Dios sobre el hombre (p.ej., Mateo 3:8; Lucas 3:8; Hech.20:21; 26:20); (b) la misericordia de Dios en dar arrepentimiento o llevando a hombres a él se expone (p.ej., en Hech.5:31; 11:18; Rom.2:4; 2 Tim.2:25). Los mss. Más auténticos omiten la palabra en Mt.9:13 y en Mr.2:17, tal como lo vierte la vm .
Nota: En el AT., no es tan prominente el arrepentimiento con referencia al pecado como aquel cambio de parecer o propósito, por piedad hacia aquellos que han sido afectados por las propias acciones, o en quienes los resultados de las acciones no han cumplido sus esperanzas, un arrepentimiento atribuido tanto a Dios como al hombre (p.ej., Gn.6:6; Ex.32:14 ; lo cual no implica nada contrario a la inmutabilidad de Dios, sino que el aspecto de su mente cambia hacia un objeto que ha cambiado en sí mismo. Véase bajo RECONCILIAR). (VINE).
En el NT el tema tiene principalmente referencia al arrepentimiento del pecado, y este cambio de parecer involucra tanto un apartarse del pecado como un acercarse a Dios. La parábola del hijo pródigo es una notable ilustración de esto. Cristo empezó su ministerio con un llamamiento al arrepentimiento (Mt.4:17), pero el llamamiento es dirigido, no a la nación, como en el AT., sino al individuo. En el Evangelio de Juan, de carácter distinto a los Evangelios Sinópticos, mencionados arriba, no se menciona el arrepentimiento, ni siquiera en relación con la predicación de Juan el Bautista; en el Evangelio de Juan y en la 1ª Epístola se acentúan los efectos, p.ej., en el nuevo nacimiento, y, generalmente, en el volverse activamente del pecado a Dios por el ejercicio de la fe (Jn.3:3; 9:38; 1 Jn.1:9), como en el NT., en general. (VINE).
[6] karpos = (καρπός, G2590), fruto. Se usa:
(I) del fruto de los árboles, de los campos, de la tierra, aquello que es producido por la energía inherente de un organismo vivo (p.ej., Mateo 7:17; Stg.5:7; 5:18); plural (p.ej., en Lucas 12:17 [para el siguiente versículo, véase Nota (1) más abajo]; 2 Tim.2:6); del cuerpo humano (Lucas 1:42; Hech.2:30);
(II) metafóricamente:
(a) de obras o actos, siendo el fruto la expresión visible del poder que obra interna e invisiblemente, siendo el carácter del fruto evidencia del carácter del poder que lo produce (Mateo 7:16). Así como las expresiones visibles de las concupiscencias soterradas son las obras de la carne, de la misma manera el poder invisible del Espíritu Santo en aquellos que son traídos a una unión vital con Cristo (Juan 15:2-8, 16) produce «el fruto del Espíritu» (Gálatas 5:22); la forma singular es sugerente de que en ellos se reproduce la unidad del carácter del Señor, esto es: «amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fidelidad, mansedumbre, dominio propio» (rvr77 ), todo ello en contraste con las confusas y frecuentemente incoherentes «obras de la carne». Así hay en Filp.1:11: «fruto de justicia» (Besson). En Heb.12:11 , el fruto de justicia es descrito como «fruto apacible», el efecto externo de la disciplina divina; «el fruto de justicia se siembra en paz» (Stg.3:18), esto es, la semilla produce aquel fruto; aquellos que hacen la paz producen una cosecha de justicia; en Ef.5:9: «el fruto de la luz» (Darby, Besson, nm , margen rvr77, Nestlé, véase contexto) se ve en toda bondad, justicia y verdad, como la expresión de la unión del cristiano con Dios (Padre, Hijo y Espíritu Santo); porque Dios es bueno, Marcos 10:18, el Hijo es el «Justo», Hech.7:52, el Espíritu es «el Espíritu de verdad» (Juan 16:13);
(b) de beneficio, provecho, consistiendo:
(1) en convertidos, como resultado del ministerio de evangelización (Juan 4:36; Rom.1:13; Filp.1:22);
(2) en santificación, mediante una liberación de la vida de pecado y mediante el servicio a Dios (Rom.6:22), en contraste con
(3)  la ausencia de nada considerado ventajoso como resultado de pecados anteriores (v. 21);
(4) de la recompensa por el servicio dado a siervos de Dios (Filp.4:17);
(5) del efecto de hacer confesión del nombre de Dios mediante el sacrificio de alabanza (Heb.13:15). (VINE).
[7] dorea = (δωρεά, G1431), denota don libre, acentuando su carácter de gratuito. En el NT., se usa siempre de un don espiritual o sobrenatural (Juan 4:10; Hechos 8:20; 11:17; Rom.5:15; 2 Cor.9:15; Ef.3:7; Heb.6:4). En Ef.4:7: «conforme a la medida del don de Cristo», el don es el dado por Cristo. En Hech.2:38: «el don del Espíritu Santo», la cláusula es epexegética, siendo el don el mismo Espíritu Santo; cf. 10:45; 11:17, y la frase: «el don de la justicia» (Rom.5:17). (VINE).
[8] peripateo = (περιπατέω, G4043) se usa:
(a) físicamente, en los Evangelios Sinópticos (excepto en Marcos 7:5); siempre en los Hechos excepto en 21:21; nunca en las epístolas paulinas, ni en las de Juan;
(b) figuradamente, «significando todo un conjunto de actividades de la vida individual, tanto de los irregenerados (Ef.4:17), como del creyente (1 Cor.7:17; Col.2:6). Se aplica a la observancia de ordenanzas religiosas (Hech.21:21; Heb.13:9), así como a la conducta moral. El cristiano debe andar en novedad de vida (Rom.6:4), según el espíritu (Rom.8:4), en honradez (Rom.13:13), por fe (2 Cor.5:7), en buenas palabras (Ef.2:10), en amor (Ef.5:2), en sabiduría (Col.4:5), en verdad (2 Jn.1:4), según los mandamientos del Señor (v. 6); y, negativamente, no según la carne (Rom.8:4), no según la manera de los hombres ( 1Cor.3:3), no con astucia (2 Cor.4:2), no por vista (2 Cor.5:7), no en la vanidad de la mente (Ef.4:17), no desordenadamente (2 Ts.3:6)» (De Notes on Thessalonians , por Hogg y Vine, p. 67). Se traduce «caminar» solo en Lucas 24:17, y generalmente con el verbo «andar». Véanse ANDAR, CONDUCIR, HACER, IR, OBSERVAR. (VINE).
[9] pleroo = (πληρόω, G4137), denota:
(I) hacer lleno, llenar hasta arriba; en la voz pasiva, ser llenado, hecho lleno. Se usa:
(1) De cosas: una red (Mateo 13:48); un edificio (Juan 12:3; Hech.2:2); una ciudad (Hech.5:28); necesidades (Filp.4:19: «suplirá»); metafóricamente, de valles (Lucas 3:5: «rellenará»); figuradamente, de una medida de iniquidad (Mateo 23:32);
(2) de personas:
(a) de los miembros de la iglesia, el Cuerpo de Cristo, llenado por él (Ef.1:23; 4:10); en 3:19, de que los miembros sean «llenos de toda la plenitud» suya; del ser de ellos hecho «completo» en él (Col.2:10);
(b) del mismo Cristo: de sabiduría, en los días de su carne (Lucas 2:40); de gozo, a su vuelta al Padre (Hech.2:28);
(c) de creyentes: del Espíritu (Ef.5:18); de gozo (Hech.13:52; 2 Tim.1:4); de gozo y paz (Rom.15:13). De estos pasajes se tienen que distinguir otros que hablan del gozo como ya completo o cumplido, y que se tratan bajo CUMPLIR (Juan 3:29; 15:11; 16:24; Filp.2:2; 1 Jn.1:4; 2 Jn.1:12); de conocimiento (Rom.15:14); de consuelo (2 Cor.7:4); de frutos de justicia (Filp.1:11, gr., «fruto»); del conocimiento de la voluntad de Dios (Col.1:9); de abundancia, gracias a la provisión material dada por hermanos en la fe (Filp.4:18);
(d) de los corazones de los creyentes como el centro de la emoción y de la voluntad (Juan 16:6, tristeza; Hech.5:3, engaño);
(e) de los irregenerados que rehúsan reconocer a Dios (Rom.1:29: «atestados»);
(II) cumplir, completar. Véanse ANUNCIAR, ATESTAR, COMPLETAR, CUMPLIR, PASAR, RELLENAR, SUPLIR, TERMINAR. (VINE).
-    NISLY, Arturo. La Doctrina del Espíritu Santo. La Antorcha de la Verdad. Número 1-6. 1993-1994. Costa Rica Centroamérica.
-    MacArthur John. “Los Carismáticos” Apologética Cristiana.
-    La Biblia de estudio mundo hispano. Editorial Mundo Hispano. Primera Edit. 1977.
-    e-Sword-the. LEDD.
-    Biblia de Estudio RYRIE. Y Teología Básica. Págs. 419, 435.
-    Pastor: Carlos Ramírez Jiménez. 1993. Arreglos 25//08//2016.












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